Con danzas, tambores, grandes penachos y ofrendas, la comunidad de Valtierrilla en Salamanca celebró a la Santa Cruz.
Mientras algunos ultimaban los detalles para la quema del castillo, los fieles católicos estaban en misa, incluso algunos vestidos de apaches y danzantes entraron al templo para llevar algunas ofrendas.
Algunos danzaban entre el jardín y la iglesia, unos descansaban sentados en las bancas del jardín, y otros compraban nieve y raspados para refrescarse mientras escuchaban el llamado para danzar de nuevo.
Los apaches, concheros y aztecas se reunieron en el atrio de la iglesia con un mismo fin, danzar al ritmo de los tambores para agradecer a la Santa Cruz cada uno de los favores recibidos y festejarla en su día.
Al final todos se llevaron aplausos de la gente por hacer de esta celebración toda una tradición y cada día más grande.
Más de la mitad de la comunidad de Valtierrilla participa en una danza, incluso hay familias en que se transmite de generación en generación participar en ello.
Al término de la misa los cuetes suenan en el aire, el caracol se escucha sonar y los tambores retumbar para el llamado de cada integrante de las danzas a que se prepare y danzar nuevamente por la Santa Cruz.
Con telas de estampado de piel de tigre, leopardo y jaguar muchos hacen sus trajes, cada quien le agrega su toque personal y los decora a su gusto y pinta su cara con colores en tono al traje.
Piden trabajo a la Santa Cruz
Sin importar el cansacio y el sueño, los trabajadores de la construcción danzaron para pedir un buen año de trabajo.