Desde los 24 años, Luz Elena Rico Cabrera trabaja como elemento de la Policía Preventiva de San Francisco del Rincón, y dice sentirse orgullosa de servir a la ciudadanía y ser madre al mismo tiempo.
Durante casi 9 años ha llevado consigo el uniforme que la identifica como la autoridad del orden público, la guardián y vigilante en turnos extenuantes de 24 horas cada vez. Pero tiene la loable responsabilidad de criar a sus dos hijos: una niña que cursa la primaria, y un niño que pronto comenzará la secundaria.
“He perdido algunos momentos para disfrutar con mis niños, pero sé que ellos comprenden mi deber y se sienten orgullosos que su mamá sea policía; y aunque a veces no los puedo llevar a la escuela, intento aprovechar el tiempo que tengo libre para dárselo a ellos”, dijo Luz Elena, de 33 años de edad.
Aceptó que ha sido duro mantener en todo momento su postura de autoridad, pues a pesar de portar uniforme y estar armada, ha sufrido de actitudes de las personas por el simple hecho de ser mujer: “La gente muchas veces no valora lo que hacemos, pero también hay quien reconoce nuestro esfuerzo y nos motiva cuando nos agradecen”, agregó.
Reconoce que cada vez que se va a trabajar, la incertidumbre y el temor de dejar a sus hijos siempre está presente, pues su trabajo implica un riesgo muy alto, sin embargo sigue su vocación que lleva en la sangre, pues varios miembros de su familia se han dedicado a esta dura profesión.
Finalizó compartiendo que en su carrera como guardiana del orden ha vivido momentos difíciles, pues ha sufrido la pérdida de compañeros en el ejercicio de su labor, pero “eso es parte de la vida como policías, todos tenemos una misión que hay que cumplir, y ser madre es el principal motivo para demostrar los valores que debemos tener todos los ciudadanos y las familias que cuidamos”.
Mujer policía, madre ejemplar
Desde los 24 años, Luz Elena Rico Cabrera trabaja como elemento de la Policía Preventiva de San Francisco del Rincón, y dice sentirse orgullosa de ser