La combinación perfecta

A tan sólo 7 kilómetros de la capital del estado de Zacatecas, se encuentra el municipio de Guadalupe, lo que a principios del Siglo XVIII hasta el Siglo XX fuera el Colegio de Propaganda Fide (Propagación de Fe) de Nuestra Señora de Guadalupe, actualmente el Museo de Guadalupe.
El museo, que conserva su aspecto original, posee una gran colección de arte sacro además de ser una galería de arte, ya que las paredes del recinto están tapizadas por pinturas de los siglos XVII al XIX, las paredes sostienen obras de Cristóbal de Villalpando, Antonio de Torres, Gabriel José de Ovalle y Miguel Cabrera.
En un total de 20 salas que en siglos pasados fungieron como cuartos, celdas, claustro, coros, etc. de los frailes franciscanos que habitaron el convento, es ahora un museo que se divide en dos secciones. Pinacoteca y museo histórico que atesora pinturas, esculturas y objetos que hacen que los visitantes se transporten a los días en que los frailes paseaban por los pasillos del edificio que hoy en día es una joya arquitectónica del municipio, estado y País.
Pueblo Mágico
Estos rincones de México son un banco de cultura nacional, ya que en ellos prevalecen tras el paso de los años los colores, tradiciones, sabores, olores que las grandes ciudades del País han perdido por diversas razones, por lo que visitar uno de los 5 pueblos mágicos del estado de Zacatecas es un deleite para todos los sentidos.
Algunas de las características que deben de tener los pequeños poblados para ser nombrados “Pueblos Mágicos”, son que deben de estar geográficamente hablando cerca de alguna zona turística o gran ciudad, tener accesos fáciles por carretera, misma que debe de estar debidamente señalizada además de tener cultura, historia, belleza arquitectónica, al igual que sean habitadas por personas sencillas.
El poblado de Jerez de García Salinas, cumple con todos estos requisitos para formar parte de la gran cantidad de “Pueblos Mágicos” de México, por lo que en 2007 se convirtió en el primero de 5 que en la actualidad tiene el estado de Zacatecas, convirtiéndose en un destino turístico nacional e internacional.
Un atractivo que realza la grandeza de Jerez es haber sido el lugar de nacimiento del poeta jerezano Ramón López Velarde, en su honor la casa que él habitaba fue convertida en un museo interactivo, donde se encuentran objetos personales del artista; mientras se aprecian los objetos, casi al oído son leídos los poemas del jerezano siendo una experiencia muy agradable.
La Feria de Primavera que comienza con la llegada cada año del Sábado de Gloria en Semana Santa, es una de las fiestas más tradicionales del pueblo, donde la Cabalgata Charra es un espectáculo especial, consiste en que más de 7 mil jinetes pasean sobre una de las calles principales del pueblo, mientras que en la zona del parque cientos de tamboras jerezanas ponen a bailar a los presentes con las canciones típicas.
El Edificio de la Torre es uno de los edificios más representativos del poblado, fue construido entre los años de 1894 y 1896 y fue destinado a albergar a las niñas jerezanas mientras tomaban sus clases, ahora sigue difundiendo conocimientos al ser el Instituto Jerezano de Cultura; el Teatro Hinojosa del Siglo XIX es otro de los edificios que se deben conocer, al albergar una belleza sencilla pero al mismo tiempo porta la elegancia que debe de poseer el mayor edificio de cultura del pueblo.
El Venerable Santuario de Nuestra Señora de la Soledad, la Parroquia de la Inmaculada Concepción, la Plaza Tacuba y el Jardín Rafael Páez, el platillo ‘Asado de Boda’ y las Arracadas Jerezanas son atractivos que debes de conocer en tu visita al Pueblo Mágico.
La Quemada
El estado de Zacatecas cuenta con tres sitios arqueológicos, La Quemada, Altavista y Loma San Gabriel, a los que puedes acudir a apreciar las ruinas que al paso de los años siguen en pie, soportando diversas adversidades.
A tan sólo 35 minutos de la capital saliendo por Jerez, se encuentra La Quemada, que siglos atrás se cree que fue asentada por Chicomostoc de la que se tiene poca información, la zona arqueológica se encuentra en el municipio de Villanueva.
Sobre una montaña se encuentran asentados los vestigios sobre terrazas artificiales, el nombre del lugar se atribuye a que en siglos pasados el lugar fue incendiado por los mismo habitantes, al ser descubierto el lugar se encontraron vasijas y demás objetos que se encuentran en el Museo de Sitio del lugar, donde también puedes encontrar una maqueta donde puedes apreciar cómo era el lugar cuando era habitado por sus creadores.
El salón de las columnas, el juego de pelota, la pirámide votiva, el palacio, una muralla de 800 metros de largo y el cuartel, son de los edificios que podrás admirar con tu visita a la zona arqueológica.