Muebles viejos, televisiones, llantas, animales muertos y todo tipo de basura industrial y tecnológica saturan los arroyos en vísperas de que comience la temporada de lluvia.
La situación preocupa a los vecinos, que están alertas ante los primeros aguaceros, y piden a las autoridades tomar las medidas correctivas necesarias.
Los arroyos que cruzan la zona urbana de León arrastran a su paso toneladas de basura y contaminación. Eso, cuando fluyen, porque la escasez de agua y el exceso de desperdicios los convierte con frecuencia en muladares.
En abril de 2009, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) entregó la custodia de 59 arroyos al Municipio de León. Pero el director de SAPAL, José Enrique Torres López, dijo que sólo se entregaron los arroyos para su vigilancia, pero las autoridades locales no tienen atribuciones jurídicas para aplicar sanciones a quienes invaden o ensucian los cauces.
Conagua se comprometió a establecer mecanismos encaminados a revisar el cumplimiento del convenio, que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2018, pudiendo ser revisado, modificado y acondicionado de común acuerdo.
“De nada han servido estos convenios dado que siguen invadiendo los arroyos y siguen convertidos en contenedores”, señaló la activista ecológica Paulina Villalobos.
En un recorrido por los principales arroyos que cruzan la ciudad se pudo comprobar que hay toneladas de basura.
Funcionarios de SAPAL señalaron que uno de los arroyos en situación más crítica es el del Ejido, que atraviesa parte del Coecillo.
A la altura de la colonia Las Fuentes, talleres mecánicos no sólo han tirado toneladas de escombro y basura, sino que han reducido el cauce, lo que genera que se desborden las aguas pluviales.
Manuel Nájera, vecino de la calle Caborca, manifestó que cada año, en temporada de lluvias, se desborda el arroyo.
“Es un serio problema año con año. Cuando llueve estamos ‘con el Jesús en la boca’”.
Otro de los más riesgosos es el llamado Tajo de Santa Ana, que comienza en Villas de San Juan y llega hasta Santa Ana del Conde. A la altura del fraccionamiento Campestre La Huaracha, se pudo constatar la gran cantidad de basura que hay: muebles viejos, llantas y hasta televisores.
“Es una vergüenza este arroyo. De nada sirve que SAPAL tenga una planta de tratamiento en Villas de San Juan y arroje aguas tratadas al canal si aguas abajo se contamina con descargas de varios nuevos fraccionamientos y la basura que tiran en colonias irregulares por donde atraviesa, y que no cuentan con servicios municipales”, señaló María de la Luz Hernández, una vecina de Valle de la Hacienda.
Entre las colonias irregulares que tiran desperdicios a los cauces están San Carlos y Barceló, que no tienen recolección de basura.
Otro de los arroyos críticos es el del Muerto, que atraviesa el barrio del Coecillo. A la altura del puente República está “sepultado” en basura, señaló Fernando Araiza Martínez, profesor de la Escuela Hermanos Aldama, que se localiza a unas cuadras del arroyo.
“Es una pena que los vecinos, a plena luz del día, tiran la basura, muchos animales muertos y esto es una pestilencia”.
Araiza, quien también pertenece a Clase Ciudadana, manifestó que los arroyos se han convertido en un gran problema de salud. Y puso el ejemplo del de Venadero, que se ha convertido en depósito de basura de colonias irregulares como Valle Imperial y California.

Autoridades ponen su parte… de mugre
Raúl Tapia Flores, vecino del Malecón del Río, denunció que las mismas autoridades tiran grandes cantidades de basura y escombro.
Aseguró que, el pasado martes, personal que realizaba trabajos de limpieza en el Malecón del Río de los Gómez tiró grandes cantidades de escombro al lecho.
“Esto no se vale. Los arroyos se han convertido en basureros focos de contaminación. Las mismas autoridades lo propician”, añadió.
En lo que va de la presente Administración municipal, el Comité Operativo de Prevención contra Inundaciones, que depende de la Secretaría de Seguridad, no ha sesionado.
Lo hará pasado mañana viernes, para analizar la problemática que hay en arroyos y puntos críticos de inundaciones.
Entre aquellos en los que se tiran toneladas de basura están Las Liebres, que atraviesa la colonia Jerez; el Canal Transversal, cerca de las instalaciones de la Cruz Roja, en el bulevar Las Torres; los de Alfaro, Mariches, La Patiña, Granizo y Los Castillos.

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