Uno de los monumentos más emblemáticos y más antiguo de la ciudad, y en el que se han invertido millones de pesos para sea un lugar turístico, es el Puente de Cabadas, es uno de los mas dañados por la gente.
A una orilla de este puente se huelen los excrementos humanos que dejan en los rincones de este monumento histórico.
Además dar pésimo aspecto los deshechos orgánicos, los hacen justo en donde están unas bancas públicas hechas de la misma cantera, que se supone que se construyeron para que la gente descanse en estos lugares, pero con esto lo que menos quiere un turista es sentarse en estas bancas.
Esta contaminación física es nociva para los que aspiran el polvo de este piso, y puede provocar infecciones respiratorias, de piel, de ojos y gastrointestinales que inician siendo ligeras y que posteriormente se vuelven graves.

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