Claudia manejaba pacíficamente por la Avenida Torres Landa, cuando de pronto escuchó un estruendo que no alcanzaba a distinguir de dónde provenía, minutos después se dio cuenta que estaban asaltando a dos mujeres que viajaban en un vehículo que circulaba delante del suyo.
Ella fue testigo del robo que sufrieron dos mujeres que fueron despojadas de 50 mil pesos, luego de haberlo retirado de un cajero de Plaza Veleros.
Sin embargo Claudia y otros conductores se quedaron pasmados, no supieron qué hacer.
Pensaban que si intervenían tenían miedo de ser agredidos por el asaltante que iba armado y si no hacían nada, temían que las mujeres fueran agredidas y ellos no podían hacer nada.
Opinó que hace falta una guía para saber qué hacer en una contingencia, pues al ser testigos de un asalto, no saben ni cómo proceder ante un acto así.
“Hace falta un plan de prevención ante tiroteos, balaceras, amenazas y cualquier acto delictivo. Nos topamos que vemos que están matando a alguien y no sabemos ni qué hacer, a mí me tocó ver el asalto y no supe qué hacer, sólo me quedé viendo, temiendo que me tocara a mí un balazo”, dijo Claudia.
Y es que aunque desde años pasados se ha prometido dar capacitación y difundir una guía de qué hacer ante un asalto, el proyecto quedó en el olvido.
El martes, una mujer resultó lesionada de un balazo en un brazo y su hermana salió ilesa, luego de que un delincuente les disparó para quitarles 50 mil pesos que acababan de retirar de un banco de Plaza Veleros.
Tras el robo, el asaltante se fue y a pesar de un operativo de la Policía Municipal, no lo ubicaron.
El asalto ocurrió cerca de la 1:20 de la tarde.
“Íbamos saliendo mi hermana y yo del banco, íbamos sobre Torres Landa cuando nos tocó el alto, a la hora de avanzar se acercó un hombre corriendo, cuando yo quise meter la velocidad, pero aún tenía un carro al frente y ya no pude acelerar, entonces comenzó a dar cachazos y se le salió un tiro que le dio a mí hermana”, dijo una de las hermanas.
“Se llevaron mi bolso donde tenía el dinero, nos quitaron 50 mil pesos, agarró el arma y se cubre con mi bolsa, sólo vi a uno, ya no supe si eran más, nosotros nos vinimos al banco porque mi hermana venía sangrando y para solicitar ayuda”, dijo la víctima.

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