A consecuencia de las continuas irregularidades en la entrada por parte de los parientes de los pacientes, en el acceso del Hospital General de esta zona se ha instalado una revisión exhaustiva a la entrada de este sanatorio, para evitar el ingreso de cualquier persona.
Josefina Uc González, trabajadora social de este Hospital, señaló que en el dispensario general se ha instalado un filtro de entrada, para no dejar pasar a cualquier persona, y sólo ingrese quien tiene una necesidad médica.
Al usuario se le checa qué consulta tiene y a qué hora debe entrar, es limitar el acceso a únicamente a personas que requieren la atención médica, en el caso de pediatría se deja pasar a los padres para que acompañen al menor de edad.
Al paciente se le permite entrar con un familiar, en el caso de que el paciente este muy grave se le deja pasar con otra persona, para que pueda atender su familiar con mayor comodidad y urgencia médica.
Esto se hace para evitar que la gente entre con alimentos, bultos voluminosos, o bien exponga a los niños a cualquier infección contagiosa que puede rondar las instalaciones, ya que muchas veces los infantes se arrastran en el suelo y se contaminan.
Este retén se instaló desde el mes de mayo, ya que mucha gente viene de vacaciones al consultorio, se instalan en los pasillos y se traen a toda la familia, esto estorba a los empleados del nosocomio porque no les permite laborar con libertad.

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