Una joven de 22 años y su hermana de 12 murieron ahogadas en el arroyo Manzanilla.
Doña Graciela, una vecina, vio cuando se metían al agua y se angustió porque la corriente estaba muy crecida.
“¡No se metan, que la corriente viene muy fuerte!”, les gritó, pero al parecer no la escucharon.
“¡Que no se metan!”, volvió a gritar con igual resultado.
En ese momento fue la última vez que vio a la joven y a su hermana, porque la corriente del arroyo -localizado entre las comunidades Agua Zarca y El Huizache- se las tragó.
Mónica Infante Hernández, de 22 años, y su hermana Luz Celeste, de 12, no volvieron a ser vistas con vida.
Ayer alrededor de las 2 de la tarde un grupo de siete amigos salió de León a pasar un día de campo.
De acuerdo a testigos entre ellos iba un hombre de edad madura, cuatro jóvenes de entre 15 y 22 años y dos niñas, una de 12 y otra de alrededor de 4.
Llegaron en dos vehículos a la comunidad Agua Zarca que se encuentra en la zona donde se corre el rally, arriba de la comunidad Mesa de Ibarrilla.
De acuerdo a testigos, los siete se pusieron un traje de baño para meterse al arroyo.
Parecía una tarde agradable de sana diversión, pero los bañistas nunca imaginaron que la corriente crecería de manera importante.
“Era un joven mas grande que todos, las dos chicas y una niña menor… estaban en traje de baño o algo así y se metieron al río y yo les grite que se salieran”, dijo doña Graciela, quien vive a unos metros del cauce.
Mónica y Luz Celeste no escucharon los gritos de advertencia y se metieron en zona profunda, junto con otro joven que estaba más a la orilla. En cuestión de segundos el cauce creció y los arrastró.
El resto de los amigos estaba afuera del agua.
“Sólo vi que se las llevó la corriente y a otro joven se lo llevó y se pegó con algo”, dijo la única testigo de los hechos.
Doña Graciela no pudo contener las lágrimas y llamó a la Central de Emergencias.
A unos metros encontraron al joven que también fue arrastrado, estaba en estado de shock pero sobrevivió.
Una hora después de pasar por  caminos lodosos llegó personal de Protección Civil, Policía Municipal y el equipo de buzos de la Cruz Roja, para iniciar las labores de rescate.
A las 5:30 de la tarde, tres horas después de que ocurrió la tragedia,  la corriente ya había bajado y los paramédicos habían recorrido más de cinco kilómetros hasta que localizaron el cuerpo de Mónica; estaba atrapada entre las piedras y a un lado del arroyo.
Los paramédicos sacaron del agua a la joven y la revisaron, pero nada podían hacer porque había fallecido. Sólo la cubrieron con una sábana blanca.
Unos 90 minutos después, a siete kilómetros de donde fue arrastrada estaba Luz Celeste. Los rescatistas sacaron el cuerpo, y junto con el de su hermana fue llevado al Servicio Médico Forense.
“Ya no las pude ayudar”, dijo doña Graciela con gran tristeza al ver que se  retiraba la camioneta del Semefo.

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