Balean a lechero

Desquiciado sujeto mató de cuatro balazos a un repartidor de leche “bronca” en esta cabecera municipal del municipio Rincón de Romos, ya que alguien le había platicado que al producto lácteo le echaba semen y excremento, sin confirmar si esto fuera verdad.
El homicidio ocurrió por la mañana sobre la calle Ejército Nacional y luego del crimen el pistolero fue detenido y llevado a prisión.
El lechero asesinado fue identificado como Jorge Arturo Padilla Ramírez, contaba con 30 años de edad y tuvo su último domicilio en la calle Chiapas número 225 en Rincón de Romos y asesinado por Carlos Israel Aguilera Ortega, de 34 años, con domicilio en la calle Ejército Nacional número 303 del mismo municipio.
El asesinato ocurrió alrededor de las nueve de la mañana con cuarenta minutos.
De acuerdo a las investigaciones de las autoridades, Jorge Arturo se dedicaba a la venta de leche, la cual repartía en su camioneta Nissan pick up, color tinto, modelo 2001, con placas de circulación AE-91-195.
A la hora mencionada llegó a la calle Ejército Nacional para vender el producto como todos los días lo hacía y una de las viviendas a las que arribó fue la de Carlos Israel, que habitaba con su mamá y su hermana.
Jorge Arturo llamó a la puerta y fue el propio Carlos Israel el que abrió, llevando en sus manos un arma de fuego calibre 22 y al ver que se trataba del lechero, sin decirle nada le disparó al pecho en una ocasión, por lo que al sentirse agredido, Jorge Arturo decidió echarse a correr hacia el poniente por la misma calle Ejército Nacional.
Carlos Israel fue en su persecución y le disparó tres veces más, impactándolo en la espalda, por lo que el lechero cayó al piso mortalmente herido.
En esos precisos instantes, de poniente a oriente, circulaba la patrulla 133 de la Policía Preventiva de Pabellón de Arteaga, cuyo conductor había ido a Rincón de Romos por uno de sus compañeros que entraría a trabajar y ya iban de regreso a la comandancia pabellonense.
En primera instancia escucharon una detonación (cuando Carlos Israel agredió al lechero en el pecho) y luego observaron cuando le disparaba por la espalda, por lo que detuvieron la marcha de la unidad, descendieron de ella y desenfundaron sus armas de fuego de cargo para amagar al pistolero y exigirle que la tirara al piso, tras de lo cual procedieron a someterlo y detenerlo, confiscándole el arma homicida.
Los uniformados reportaron los hechos a su base en Pabellón de Arteaga y de ésta llamaron a la de Rincón de Romos para informar lo sucedido, por lo que varios oficiales se trasladaron al lugar y recibieron al pistolero detenido.
Al interrogarlo sobre el motivo de la agresión, Carlos Israel les dijo que unos amigos le habían comentado que el lechero le ponía semen y excremento a la leche y así la vendía, lo cual le dio mucho coraje y por eso lo mató.
Al sitio también acudieron paramédicos del ISSEA a bordo de la ambulancia ECO-332, que revisaron a Jorge Arturo y le detectaron signos vitales débiles, por lo que le brindaron los primeros auxilios y lo trasladaron de urgencia al Hospital General de Rincón de Romos para que fuera atendido.
Al ingresar al área de urgencias y comenzar a ser atendido cayó en paro cardiorrespiratorio y falleció a causa de los cuatro balazos recibidos, consumándose así el homicidio.
Las autoridades ministeriales fueron enteradas de lo ocurrido, por lo que el Ministerio Público acudió a dar fe del deceso del lechero y mientras agentes del Grupo Homicidios realizaban las pesquisas iniciales, elementos de Servicios Periciales levantaron el cadáver y lo trasladaron al Semefo para la práctica de la autopsia de ley.
El detenido, por su parte, fue puesto a disposición del AMP para que respondiera por el crimen.