Un hombre fue acribillado en el auto Passat que conducía en las puertas del Centro de Readaptación Social, frente a los custodios.
De sus tres acompañantes, dos resultaron heridos y uno ileso.
Testigos se asombraron del ataque a pocos metros de donde se encontraban los guardias del penal.
“¿Cómo es posible que lo hayan matado en la cara de los custodios?”, dijo uno de ellos.
Cerca de las 5 de la tarde de ayer Víctor Torres salió del Cereso después de visitar a un familiar que fue detenido hace dos meses por portación de una granada, según informaron fuentes cercanas a la investigación.
Apenas pasó la aduana, a 50 metros de la entrada a la penitenciaría, un grupo armado lo interceptó y detonó varias armas contra él y sus acompañantes.
Según testigos se escucharon más de 15 disparos, al parecer de una metralleta.
“Yo siento que fue como una metralleta porque (los disparos) se escuchaban uno tras otro, se escucharon muy rápido”, dijo una mujer.
Las autoridades señalaron que fueron 14 balas las detonadas contra los ocupantes del Passat, los investigadores localizaron varios casquillos de distintas armas de las que aún se desconoce el calibre.
La víctima iba en el auto acompañado de sus presuntos familiares, a quienes las autoridades identificaron como Alan Alejandro Márquez, Alan Márquez González y José Rafael Hernández Ramírez.
Las autoridades informaron que cuando salían del Cereso los homicidas les dispararon desde dos camionetas.
Al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal, Ministerial y agentes de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado y acordonaron el lugar.
Paramédicos de la Cruz Roja auxiliaron a los heridos, pero ya no pudieron hacer nada por Víctor Torres porque ya no presentaba signos vitales.
En la ambulancia llevaron a un hospital a un hombre con un balazo en una mano, el segundo lesionado tuvo una herida en la pierna izquierda.
Se presume, según las autoridades, que los agresores huyeron en dirección a Cuerámaro en una camioneta Captiva con tablillas GTT-1525, que agentes de la Policía Municipal y Ministerial encontraron volcada en una zanja atrás de las instalaciones de la UNAM.
Se informó que al parecer el otro vehículo en que viajaban los atacantes era una camioneta Nitro color vino.
Según un testigo la camioneta se volcó debido al exceso de velocidad, las autoridades aseguraron que en ese momento se detonaron armas.
Enseguida, de acuerdo al mismo testigo, los ocupantes salieron en ropa interior y corrieron entre el sembradío para escapar.
Alrededor de las 7 de la tarde el director de la Policía Municipal, Francisco Aguilera Candelas, señaló que el operativo de búsqueda seguiría hasta encontrar a los agresores y al otro vehículo en que escaparon.
Una fuente extraoficial informó que en el Cereso a los visitantes, reclusos y custodios les fueron retirados aparatos de comunicación como celulares o radios.
Peritos ministeriales acudieron al lugar del crimen para recopilar evidencias, y ordenaron el traslado del cuerpo para que se le practique la autopsia.

Lo vinculan con detenidoscon granada y $240 mil

El hombre asesinado en las puertas del Cereso al parecer visitó a un interno que supuestamente está vinculado con un incidente ocurrido a finales de junio, de acuerdo a fuentes cercanas a la investigación.

De acuerdo a las informaciones oficiales, el día 24 de ese mes dos hermanos de 27 y 23 años fueron detenidos por participar en una riña en el bar La Chopería, de la zona del Campestre; cuando policías revisaron su auto encontraron una granada, un arma de fuego, cartuchos útiles y 240 mil pesos.
Meses antes, en febrero, los hermanos fueron detenidos con otro joven tras un cateo a su casa en la calle Jardín de los Olmos de la colonia Gran Jardín, donde militares y policías encontraron armas de fuego y chalecos antibalas.
Al parecer uno de los detenidos tenía pendiente una investigación por robo de vehículos, según comunicaron las autoridades en ese entonces.
Los oficiales y soldados también decomisaron tres vehículos: un Mercedez Benz deportivo con placas sobrepuestas, un BMW Mini Cooper con el número de serie alterado, y un BMW convertible con placas del Distrito Federal sobrepuestas.

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