El presidente Enrique Peña Nieto presentará su Primer Informe de Gobierno en medio de una marcada desaceleración económica.
Durante el segundo trimestre del año, la expectativa de crecimiento anual del Producto Interno Bruto se desplomó en casi la mitad, al pasar de 3.1 por ciento pronosticado en marzo, a 2.5 por ciento en julio y 1.8 por ciento en agosto. Dicha caída fue el resultado de una mayor desaceleración.
El 20 de agosto pasado, el INEGI indicó que el PIB disminuyó en 0.74 por ciento en comparación con el primer trimestre del año. De acuerdo con el organismo, esta es la primera vez desde 2009 que se registra una tasa negativa en términos desestacionalizados.
El 23 de agosto, el INEGI informó que la tasa de desempleo aumentó, del 5.02 por ciento registrado en julio de 2012, a 5.12 en julio de 2013. Horas más tarde, el Banco de México señaló que las remesas se redujeron de 6 mil 416 millones de dólares, entre abril y junio de 2012, a 5 mil 881 millones de dólares en el mismo periodo de 2013.
En círculos financieros se habló de un “viernes negro”.
De acuerdo con cifras oficiales, la Inversión Extranjera Directa (IED), los ingresos no petroleros y las exportaciones son los únicos indicadores que registraron incrementos en la primera mitad del año; no obstante, esto fue insuficiente para contener la desaceleración de la economía.
La IED aumentó, de más de 9 mil 600 millones de dólares en el primer semestre de 2012, a cerca de 24 mil millones de dólares en el mismo periodo de 2013. Pero los ingresos no petroleros aumentaron sólo 4 por ciento y el costo de las exportaciones creció únicamente 0.6 por ciento.
Para el vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas, Jonathan Heath, el mal desempeño es consecuencia de un menor dinamismo en las exportaciones y el gasto público, la contracción de las inversiones, la reducción de las remesas y la caída del sector de la construcción.
“El factor principal ha sido el menor dinamismo de las exportaciones petroleras, nuestro motor principal de crecimiento. Su falta de dinamismo se debe al débil comportamiento externo y al poco crecimiento de la producción manufacturera que ha experimentado Estados Unidos”, indica.
El especialista considera que el freno en la inversión fija bruta del sector privado obedece a cinco factores: la incertidumbre de las acciones del nuevo gobierno, las discusiones de reformas estructurales que no se concretan, el débil entorno económico, la disminución de las remesas y la crisis del sector vivienda que golpeó a la industria de la construcción.
Para los ciudadanos, la desaceleración económica se tradujo en un mayor desempleo, un incremento en el precio de los artículos básicos y la consecuente pérdida del poder adquisitivo.
Datos del INEGI muestran que, entre marzo y junio, el número de personas desempleadas pasó de 2.5 a 2.6 millones.
Además, las condiciones de empleo empeoraron, pues de los 49.5 millones de personas ocupadas, 12.5 por ciento se encuentra en condiciones precarias.
El poder adquisitivo de los mexicanos también fue afectado. Cifras de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos indican que para 2013 el salario base de los trabajadores se incrementó en 3.9 por ciento; mientras que la inflación al mes de junio se ubicó en más del 4 por ciento.
Ante ello, el 14 de agosto pasado la Asociación Nacional de Autoservicio y Departamentales de México advirtió que las ventas comparables de sus afiliados cayeron 2.3 por ciento interanual en julio.
Para el economista Fausto Hernández Trillo, la caída en las ventas es el indicador más preocupante.
“La gente no está gastando; la pregunta es ¿por qué? Y aquí hay muchas explicaciones: una es que el crédito al consumo se detuvo, parece ser que se han elevado también las carteras vencidas. Una segunda es que la gente está a la expectativa; la gente no es economista pero sí ve la calle y prefieren no gastar. Y la otra es que no se ha generado el empleo, entonces el consumo se detuvo. No puedo dar la ponderación de cada una, pero sí creo que es una combinación de las tres”, advierte.
El investigador del CIDE admite que nueve meses de gobierno es poco tiempo para cambiar inercias en la economía, como la dependencia hacia Estados Unidos; no obstante, califica como un riesgo que el actual gobierno se concentre sólo en impulsar reformas como la energética y la fiscal, y se distraiga de su obligación de definir políticas públicas.
“A mí lo que me preocuparía es que se calderonizaran. ¿Qué es calderonizar?, creer que su única obligación es pasar reformas y eso te distrae de una ruta crítica de integrar la política pública en torno a elevar la productividad, disminuir la pobreza y la desigualdad”, sostiene.
Hernández Trillo señala que, a pesar de que han pasado nueve meses de la actual administración, aún no es claro cuál será la ruta crítica que seguirá para dinamizar la economía y mejorar la calidad de vida de las personas.
“Las reformas sí son necesarias, pero como que han sido y se han convertido en el único fin. Ya es tiempo de que hubiéramos visto algunas políticas integrales y esto no tiene nada que ver con el bloqueo en el Congreso, es literalmente falta de brújula”, indica.
En este escenario económico, la administración Peña Nieto prepara su propuesta de paquete económico 2014 y su iniciativa de reforma hacendaria.
El secretario de Hacienda, Luis Videgaray, ha dicho que los objetivos de la reforma que propondrá el Ejecutivo al Congreso son: fortalecer la capacidad financiera de los tres niveles de gobierno, incrementar la progresividad del sistema impositivo -”que quien gane más pague más”-, combatir la informalidad y modificar el régimen fiscal de Pemex para que sea tratada como una empresa.
De acuerdo con el titular de Hacienda, con la aprobación de ésta y otras reformas, como la energética, México podría crecer por arriba del 2 por ciento que, en promedio, ha registrado desde hace más de una década.

RED DE REDES TÚ ERES PARTE

Vuelve el antipeñismo a Twitter
Domingo 25 de agosto, una semana antes del Primer Informe de Gobierno de Enrique Peña Nieto, las protestas contra el Presidente reaparecieron en la red social Twitter y se hicieron tendencia. Seguidores del #YoSoy132
y otros tuiteros colocaron la etiqueta #FueraPeñaNieto1Smx en el primer lugar e tendencias, con 17 mil 911 réplicas.

@YoSoy132Media: “Éste 1o de Septiembre todos a la calle! #FueraPeñaNieto1Smx”

Las invectivas que acompañaron esta etiqueta recordaron las críticas de diciembre de 2011, cuando el entonces precandidato erró al enlistar sus tres libros favoritos en la Feria del Libro de Guadalajara, o las que surgieron el 11 de mayo de 2012, después de que enfrentó protestas en la Universidad Iberoamericana. El hashtag del domingo fue tendencia en México hasta el lunes, sin desaparecer totalmente durante la semana previa al Informe. El lunes 26, algunos activistas convocaron a un retuiteo masivo contra @EPN.

@GastosPendejos: “RT MASIVO Platicale a todo el mundo que este 1ero de Septiembre vamos a dar un paso adelante en la historia de México!” #FueraPeñaNieto1Smx

Un nuevo hashtag apareció el martes en la red social: #PeñaNietoTieneMiedo. El mensaje cobró fuerza rápidamente. Por ejemplo, un tuit de Epigmenio Ibarra fue replicado cerca de 268 veces.

@epigmenioibarra: “El miedo es peligroso. Despierta lo peor de los hombres: La intolerancia, el odio a lo diferente. Cuidado Mexico #PeñaNietoTieneMiedo”
ta etiqueta tomó fuerza con la información de que el Presidente daría un mensaje con motivo de su Informe en el Campo Marte, superando a la anterior, pues en un día llegó a 24 mil 956 impactos. La publicación de gráficos o Memes incrementó la difusión.

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