El sacramento de la eucaristía invadió por primera vez el alma de Giselle Mayer López, quien luego de varias semanas de intensa preparación espiritual, se dispuso a ingresar a la Casa de Dios.
El encuentro con el Cuerpo y la Sangre de Cristo se vivió en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, recinto al que acudieron los amigos y familiares de la menor.
Maryella López Sandoval y Miguel Irastorza, papás de la comulgante, acompañaron a su hija en este importante momento con Jesucristo, donde además prometieron seguir educando a su hija en base a los mandamientos de la Iglesia católica.
Victoria Irastorza Origel participó como madrina de Giselle, y ante el altar de Dios prometió estar alerta de la educación de su ahijada.
Al término de la ceremonia religiosa, el padre Armando Haro invitó a papás y padrinos a pasar al frente y en compañía de la comulgante recibir la bendición de Dios.
Al jardín de San Antonio de Ayala, acudieron sus familiares y amigos del colegio de Giselle, para disfrutar junto a la comulgante de una especial mañana.
Giselle disfrutó de un día lleno de diversión y muchas sorpresas, al recibir lindos presentes por parte de sus seres queridos.
Al llegar la tarde, los papás de la festejada agradecieron el acompañarlos en esta memorable fecha en la vida de su hija Giselle.
Giselle realiza su primera comunión
En el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, la pequeña recibió por primera vez el Cuerpo y la Sangre de Cristo como nueva comulgante.
