Provoca molestias nuevo “gasolinazo”

El noveno incremento al precio de los combustibles en lo que va del presente año impactó a taxistas, transportistas y automovilistas en general.
A partir de ayer la gasolina Magna cuesta 11.80 pesos, la Premium 12.36, y el Diesel 12.16, lo cual generó reacciones entre los consumidores.
“Ya no se puede seguir sosteniendo tarifas bajas. El precio mínimo que cobramos es de 35 pesos en tramos cortos de unas cuantas cuadras”, señaló Alfredo Flores Gutiérrez, taxista.
Los ruleteros se justifican diciendo que además de la gasolina tienen que pagar al patrón una liquidación que va de 300 a 450 pesos diarios.
“Al final el que paga es el ciudadano. Al Gobierno no le importa seguir subiendo los precios cada mes”, añadió Flores.
David Martínez Velázquez es comerciante y señaló que los incrementos a la gasolina se ven reflejados en el precio final de los productos veterinarios que vende.
“Te aumentan la gasolina y te roban en las gasolineras dándote litros de menos. Hay que hacer ajustes en los precios de todos los productos y esto genera inflación”, aseguró.
El nuevo incremento al combustible provocará también un aumento en las tarifas del transporte de carga, dijeron ayer transportistas afiliados a la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga en Guanajuato (Canacar).
“Nos pega directo por el diesel, que es el gasto más alto del autotransporte, nuestro problema es que le vamos a tener que repercutir en las tarifas”, expresó Martín Vázquez, quien tiene camiones de carga.
Permisionarios del transporte urbano de León señalaron que los incrementos a la gasolina son preocupantes, por lo que urgen la instalación de la Comisión Mixta Tarifaria para que se autorice un aumento a las tarifas del pasaje.
El tesorero de Transportistas Coordinados de León, Jesús Mejía, precisó que el último incremento se autorizó en diciembre de 2010, pero entró en vigor en enero de 2011.
“No es posible que cada mes nos suban la gasolina y no hay ni quién lo pare. No sé hasta dónde vamos a llegar, pues ya no ajusta el dinero para nada”, dijo Josué Lira, automovilista preocupado.