Alrededor de mil 200 maestros de los 46 municipios adheridos a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se manifestaron afuera del Congreso del Estado y del Palacio de Gobierno, en rechazo a la reforma educativa, porque consideran que es un atropello en contra de los derechos laborales de los profesores y normalistas del País.
Varias calles del Centro Histórico fueron cerradas momentáneamente mientras los maestros marchaban con rumbo al Congreso del Estado, donde sólo estuvieron unos 20 minutos.
Luego continuaron hacia el Palacio de Gobierno, donde los esperaban más de 50 elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado, para evitar que los maestros ingresaran a la fuerza.
“Hacemos un llamado al Presidente de México y a los diputados para que deroguen la llamada Reforma Educativa que nos han impuesto. No basta solamente con discursos, sino con hechos contundentes, de esta manera podemos pedir la destitución del Secretario de Educación, Emilio Chuayffet, y de todos los políticos que han aprobado la reforma”, mencionó Martín Martínez, representante del CNTE.
Durante la marcha lanzaron consignas en contra del presidente Enrique Peña Nieto e invitaron a la sociedad a unirse en un frente común para que no se lleven a cabo las reformas estructurales, porque dicen que atentan contra la soberanía nacional.
Los maestros argumentaron que la reforma educativa obligará a los padres de familia a pagar agua, luz, teléfono y demás servicios de las escuelas, así como a comprar los libros para sus hijos.
“La mal llamada reforma educativa contiene afectaciones porque por un lado se deja en la basura el derecho escalafonario, además contempla el despido de los trabajadores a través de la aplicación de la evaluación estandarizada, es una afectación a la estabilidad laboral porque se acaba la plaza base.
“Esta medida también termina con el derecho a reserva de base y toda esta parte es de agravio, de perjuicio a los maestros”, agregó Martínez Contreras.
Finalmente, una comitiva de 10 profesores entró al Palacio de Gobierno y fue atendida por asesores del Gobernador, quienes se comprometieron a hacer llegar el pliego petitorio al presidente Enrique Peña Nieto.
A las 4 de la tarde, los maestros se retiraron, la protesta se llevó a cabo de manera pacífica.

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