Regresan 130 varados de Acapulco

Después de cinco días de desesperación, angustia y miedo, 130 celayenses que viajaron a las playas de Acapulco el pasado fin de semana, y que quedaron varados por los efectos de los ciclones “Ingrid” y “Manuel”, por fin regresaron ayer a Celaya.
Después de que fueron rescatados los vacacionistas provenientes de Ixtapa Zihuatanejo, y que se creía que sería más difícil sacar a los afectados en Acapulco, ayer Gobierno del Estado dispuso un vuelo para trasladar a una parte de los afectados.
En total fueron 180 guanajuatenses que volaron desde este Puerto hasta el aeropuerto de México, Distrito Federal y de ahí viajaron en autobús a su lugar de origen.
En este vuelo viajaron 130 celayenses, 30 personas de Irapuato y 20 más de León.
El resto de los afectados varados en Acapulco, salió en el transcurso de ayer a bordo de autobuses, y seguirán viajando durante todo este fin de semana. Sólo saldrá un vuelo más.
“Nosotros fuimos de los que salimos primero, pero todavía se quedó allá mucha gente, no son pocos, no son 60 personas como dicen las autoridades, son muchos, muchos más. Son centenas de personas que hay de todo el estado, hay todavía muchos de Celaya, pero ya bendito sea Dios ya existe tranquilidad, pues sabemos que el Gobierno del Estado está allá, ayudando a los que se quedaron”, platicó Alejandro Bocanegra, que es uno de los celayenses que quedó varado.
Visiblemente feliz, bajó del camión y agradeció estar en su tierra; “es una bendición estar en casa”, dijo.
Platicó que lo que se vive en Acapulco es una verdadera tragedia, que para él y su familia resultó una experiencia muy dolorosa y que pasó de la fiesta a la desesperación.
Aunque está contento de estar en Celaya, se quedó preocupado porque parte de su familia aún está en Acapulco; algunos se quedaron porque ya no cupieron en el vuelo.
“Estamos muy agradecidos porque allá llegó gente de la Secretaría de Turismo y nos ayudó, allá nos dijeron que a todos los ayudarán a salir, aunque los demás van a salir en camiones. Ya abrieron las carreteras a las 2 de la tarde, va a ser lento el regreso pues son muchos los que quieren salir, pero al final ya se acabó la pesadilla para nosotros”, manifestó.
Y al mismo tiempo, contó que ahora la tragedia se queda para las personas originarias de Acapulco que tendrán la misión de continuar su vida en medio de la catástrofe y de haber perdido sus bienes.