El Primer Informe de Gobierno de la alcaldesa Bárbara Botello Santibáñez contó con un intenso dispositivo de seguridad, que abarcó desde el bulevar San Juan Bosco hasta la sede del evento.
Fueron alrededor de 600 elementos de Policía Municipal, Protección Civil, Tránsito, Bomberos, así como 10 camionetas del Ejército y Policía Federal, los que formaron parte del operativo, con el fin de mantener el orden, atender cualquier contingencia y dar fluidez a los automovilistas.
“Tenemos un dispositivo por toda la avenida Aristóteles (distribuidos) en tres anillos, en las inmediaciones del evento. Tenemos 400 elementos participando ahorita y el Ejército y las Fuerzas del Estado se suman al patrullaje”, dijo el titular de Policía Municipal, Francisco Javier Aguilera.
En la entrada a las carpas donde la Primer edil rindió el informe, se colocaron arcos detectores de metal para evitar el acceso de armas.
Todo se desarrolló con normalidad, excepto el embotellamiento al término del informe, ya que para la salida de vehículos la avenida principal resultó insuficiente.
A todos aquellos que llevaban alguna pancarta, oficiales de mediación y personal de Verificación Normativa se encargaron de montar un retén para revisar que no tuvieran mensajes ofensivos. Mencionaron “es libertad de expresión, nada más es (censura) de groserías”.
La única contingencia que se presentó fue el desvanecimiento -presuntamente por insolación- de una joven embarazada que al parecer estuvo esperando el informe desde las 11 de la mañana, pero fue estabilizada por elementos de Protección Civil.

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