El inusual desafío a Berlusconi podría indicar que la influencia del tres veces primer ministro está erosionándose en Italia, especialmente después de su sentencia y condena a cuatro años de prisión, que amenazan su banca en el Senado. Pero el multimillonario de 77 años ha sobrevivido numerosos contratiempos políticos en el pasado para resurgir como el ave Fénix.
Carlo Giovanardi, aliado de Berlusconi, anunció el martes que tanto él como muchos otros legisladores de centroderecha votarán para mantener a flote el gobierno de cinco meses del primer ministro Enrico Letta. Esos votos aumentan la posibilidad de que Letta obtenga un voto de confianza el miércoles que permita sobrevivir al gobierno.
“Tenemos el número: somos más de 40”, dijo Giovanardi a la prensa. “Estamos decididos a mantener el equilibrio del gobierno y es por eso que votaremos a favor” en el voto de confianza.
Las presiones a Berlusconi para que abandone su estrategia de aguafiestas están aumentando, especialmente después que su heredero político y exministro de justicia, Angelino Alfano, lo desafió abiertamente.
“Sigo convencido firmemente de que todo nuestro partido debe dar mañana a Letta el voto de confianza”, dijo Alfano según la prensa, y agregó que el Partido de la Libertad, de Berlusconi, debería evitar un cisma.
Alfano se desempeñó como ministro del interior en el gobierno de Letta hasta la semana pasada. Allí fue cuando Berlusconi, descontento de que los legisladores de centroizquierda fuesen a votar en un comité del Senado para despojarlo de su banca senatorial a causa de su condena, demandó la renuncia de sus cinco ministros.
La renuncia de los ministros convenció a Letta de que necesitaba un apoyo renovado en el Parlamento, lo que motivó el voto de confianza del miércoles.
Algunos incondicionales de Berlusconi dijeron que votarían por Letta solamente si su líder lo permitiera. Se dijo que el martes por la tarde Berlusconi estaba en su residencia trazando un plan de acción.