Ayer por la mañana comenzaron las labores de limpia y desmontaje del lugar en que se celebró el Informe de Gobierno.
Montones de sillas dobladas, toldos desarmados y letreros alusivos al Informe yacían en el suelo a mediodía, mientras un camión del Sistema Integral de Aseo Público recorría las calles.
“Estuvo buena la fiesta ayer”, exclamó María Guadalupe López Pérez, quien barría para limpiar el lodazal causado por las lluvias. De paso, pidió a Bárbara Botello pavimentar las calles.
De acuerdo con personal de las diferentes empresas que facilitaron el mobiliario para el evento, no hubo daños qué lamentar.
Juan Sánchez formó parte del equipo que se encargó de instalar, y posteriormente desmontar las carpas que cubrieron a los asistentes al Primer Informe.
“Hoy (ayer) temprano empezamos, esto de desmontar nos lleva entre uno y dos días, la verdad es que nosotros encontramos todo tal cual lo pusimos, sin daños”.
Fabián Moreno Pérez, miembro de una empresa que rentó cerca de 950 sillas, expresó que lo único fue el desorden.
“Estaba todo regado, parece como si hubieran peleado, pero no creo”, dijo mientras se esforzaba para juntarlas.

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