En el Domo de la Feria se gestó un triunfo formidable de Lechugueros con pizarra de 87-75 sobre Halcones de Xalapa, con cinco seleccionados nacionales además del coach Valdeomillos.
“Nosotros estamos demostrando en este momento que no hay equipo débil, no hay que menospreciar a nadie”, dijo el coach lechuguero Tomás Canizales.
Y es que presentarse ante la base de la Selección nacional de México que fue campeona del Premundial, no era tarea fácil, por lo que los Lechugueros optaron por la concentración, la lucha cuerpo a cuerpo.
La rareza del juego consistió en la baja efectividad de ambos equipos, por una parte Lechugueros apenas asistió en 33 ocasiones de sus 82 intentos, mientras que Xalapa tuvo veinte lanzamientos menos con la efectividad de apenas el 45%.
La diferencia entre las quintetas estuvo en los rebotes obtenidos, pues el local recuperó más balones que nunca con 51, Halcones no llegó a los 30.
A las Lechugas no les gustaron las cosas fáciles y a cambio de hacer canastas sencillas, prefirió hundir la pelota, realizar la colada por el centro, los responsables tuvieron referente en Gregory Preer, Deilvez Yearby, Babacar Camara y Ryan Moss.
De hecho hasta el tercer cuarto la carrera iba pareja. Lechugueros firmó su primera ventaja en el partido tras la finalización del tercer episodio por 64-60. De ahí los últimos diez minutos fueron de inteligencia absoluta.
Guiados por el bote de pelota de Luis Pulido, Lechugueros fue constante y cerró los espaciosa Halcones, que impotentes comenzaron a faulear al enemigo. Con el marcador de 78-65 a falta de 4:47 minutos, Lechugueros afianzó la victoria.
Jovan Harris dio dos puntos con un gancho, inmediatamente Yearby reaccionó con una clavada, y Pulido aprovechó el rebote recuperado para mandar tres puntos al registro. Un robo más de balón mareó a Xalapa con la rotación de balón que terminó con una salvaje clavada de Preer para sentenciar.
Dulce victoria para Lechugueros
Aún dándose el lujo de fallar un alto porcentaje de tiros, Lechugueros defendió con garra su casa exitosamente ante unos desconcertados Halcones de Xa