Recibe premio Yesenia

La voleibolista laguense Erika Yesenia Segoviano, quien recibió el premio de deportista del año en la categoría de capacidades especiales, se ha ganado este reconocimiento a pulso con año muy activo, participando desde los Deafylimpics en Bulgaría hasta la conformación de la escuela Alcaldes de Lagos de voleibol.
El deporte se ha vuelto un estilo de vida para Erika Yesenia Segoviano, la conocida voleibolista laguense que ha recibid premios en todos los niveles y ha destacado de manera importante desde hace ya vario tiempo esta disciplina en el área para sordos.
Los logros de Yesenia en el voleibol para sordos, la han llevado a ser seleccionado estatal y nacional, siendo esta ultima su mas importante etapa, participando durante el 2012 en los Juegos Panamericanos para capacidades especiales, que se realizaron en Brasil, coronándose junto con el selectivo nacional como campeón panamericana.
Fue este logro el que le dio derecho a participar en el los juegos olímpicos llamados “Deafylimpics” que se realizaron en Bulgaría durante Julio y Agosto de este año, logro que no se realizaba desde hace 20 años por México, quedando en el lugar numero 8 del ranking mundial.
También Yesenia recibió el galardón llamado “De Jalisco a las mujeres”, en la edición 2010 por el merito deportivo, este año también estuvo nominada a ganar la medalla estatal al merito deportivo.
Actualmente Yesenia se encuentra integrada al proyecto de voleibol, Alcaldes de Lagos, en donde se encuentra integrados personas con discapacidad auditiva así como jugadores de todas las edades, participando en diferentes torneos regionales.
El pasado viernes por la noche, cuando le fue entregado el premio de deportista del año en capacidades especiales, se mostró muy emocionada y contenta por este logro que se agrega a su infinidad de titulos recibidos.
“ Sigo teniendo la satisfacción de seguir recibiendo premios y reconocimientos, pero tenemos que seguir luchando para cumplir nuevas metas y solo dios sabe hasta cuando nos retiraremos del deporte, esperemos que nunca”