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Cuando más lo necesitaban los Acereros pudieron contar con su mariscal de campo, Ben Roethlisberger.
Con malos juegos sobre él al inicio de la temporada, “El Big Ben” respondió el domingo en el Heiz Field ante los Leones de Detroit, a quienes vencieron 37-27.
Altibajos y malas decisiones en jugadas, algunas de ellas claves, tenían al mariscal de campo del equipo de Pittsburgh como un villano, pero su figura cambió drásticamente después de vencer a los Leones.
Roethlisberger completó siete de 10 pases para 82 yardas en la última ofensiva del equipo ante Detroit, que con una atrapada del fullback Will Johnson, logró ganar y ponerse 4-6, aún con esperanzas de playoffs en la División Norte de la Conferencia Americana.
Además, en el resto del partido, tuvo brillantes intervenciones. En el arranque del último periodo, los Acereros tomaron el balón en su yarda tres, y con calma fueron trabajando su ofensiva hasta que “Big Ben” encontró a Antonio Brown en tercera oportunidad y nueve por avanzar con pase de 16 yardas. Continuó la serie con un avance de 10 yardas y otro de 12, hasta conectar en zona de anotación con Le’Veon Bell.
Jugadas después, habilitó a Johnson para darle a Pittsburgh la anotación de la esperanza esta campaña.