En promedio, un local comercial en la calle Madero se cotiza casi al doble de otro local de las mismas características ubicado en la Pedro Moreno.
En promedio el metro cuadrado en renta en la Madero es de 129 pesos, mientras en la Pedro Moreno es de 69 pesos.
La distancia entre una calle y otra es de apenas una cuadra. Sin embargo, los locales de la Madero son ahora más cotizados.
A partir de la construcción de la Plaza Expiatorio, se reavivó la actividad comercial en esa calle. Por las tardes y noches, hay intenso movimiento por un circuito de restaurantes, bares y cafés instalados a lo largo de la avenida.
Los locales y las casas que son acondicionadas como comercios, han subido de precio.
El tramo más caro es entre las calles Libertad y La Paz, que en promedio cuesta la renta 160.7 pesos por metro cuadrado.
En ese tramo se concentran locales de comida, preparatorias y bares; es decir, tiene más locales comerciales que casas habitación.
La Unidad de Investigación de AM realizó un sondeo con dueños de 71 fincas en 12 calles del Centro, para ubicar las zonas más caras. A la par, se consultó a agentes inmobiliarios y peritos valuadores.
El sondeo arrojó que la Madero se ha convertido en una de las calles más caras y cotizadas del Centro, sólo superada por la Progreso, que va del Malecón al Arco de la Calzada.
En las calles paralelas a la Madero, como lo son Pedro Moreno, 5 de Febrero y Díaz Mirón, las rentas de locales se cotizan hasta 50% más baratos.
Los locales ubicados en las calles que cruzan de norte a sur por la Madero son todavía más baratas.
Por ejemplo, en la calle licenciado Verdad el metro cuadrado en renta se cotiza en 53 pesos, en la Vicente Guerrero en 33 pesos y en Manuel Doblado en 45.8 pesos.
En esas calles las rentas son hasta 4 veces más baratas que en la Madero.
Las calles más cercanas a la Zona Peatonal son las más caras del Centro.
Por ejemplo, en la calle Gante el metro cuadrado en renta se cotiza hasta en 333 pesos.
‘Hay más vida’
“La calle Madero ha subido y ha despertado un corredor interesante de restaurantes y bares en la noche”, reconoció el arquitecto Ricardo Miguel Loyola, perito valuador inmobiliario.
Consideró que calles aledañas se contagian de la afluencia de gente, y poco a poco se van llenando de comercios.
“En cierta manera los ejes principales también se contagian con la afluencia que empiezan a tener las calles principales; las que son aledañas empiezan también a tener una cierta revaloración también”.
Consideró que el hecho de que la calle Madero se haya llenado de comercios como bares y cafés, ha sido un factor importante para que la Zona Centro aumentara su valor.
“Si hay más comercios, si hay más vida, si hay más movimiento económico, por supuesto que se revalúa la zona y va su valor para arriba, en beneficio tanto de la ciudadanía como de los propietarios”.
Mariano Azuela Espinoza, perito valuador inmobiliario, reconoció que la Zona Centro ha subido de valor.
“Los centros comerciales están clasificados como de lujo y la Zona Centro es una plaza comercial con acceso para todos los bolsillos. Todas las calles que convergen hacia el Centro han crecido en plusvalía fuertemente cada año”.
María de la Luz Vieyra, asesora inmobiliario, afirmó que el arreglo de la calle Madero ha elevado su plusvalía.
En contraste, reconoció que las calles aledañas a la Madero no han recibido el mismo crecimiento de valor, en parte se debe a que las oficinas y locales necesitan espacios de estacionamiento y esta zona carece de ellos.
Óscar Javier López, asesor inmobiliario, estimó que el valor de la calle Madero ha crecido hasta el 100%.
“Se convirtió en una parte histórica, pero comercialmente hablando ya no es mucho lo que le queda a esa avenida”.
’Hay saturación’
En contraste con el optimismo de agentes y peritos valuadores, la dueña de Inmobiliaria Sigma, Rocío Velázquez Tirado, consideró que el valor de la calle Madero y en general de la Zona Centro ha bajado debido a la saturación de comercios.
Y es que a decir de ella, la gente ahora prefiere rentar lugares más económicos y más vistosos, y en lugares menos saturados, para así disminuir el precio de su mercancía.
“Aunque los bancos y los papeles digan otra cosa, en el momento de la adquisición la gente que puede comprar no quiere comprar más caro, pero como ya hay muchos comercios, la gente se está yendo a otros lados”.
La baja en precios -dice- se debe también a que la mayoría de las casas de la zona son antiguas, lo que devalúa aún más su costo, en ventas o rentas, por lo que es más valioso el propio terreno que la construcción.
La falta de estacionamientos en la calle Madero, así como la saturación de comercios, hacen que el valor de los locales sea menor a lo que pudieran cotizarse. Además de ser una zona convertida en peligrosa por la afluencia de gente en horarios nocturnos.
“Ahorita la gente ya no te da ni la mitad de la renta. Si antes rentabas un local en 10 ó 12 mil pesos, ahorita la gente ya no estará dispuesta a pagar más de 6 mil pesos, la luz es muy cara porque son instalaciones viejas, hay fugas de luz, fugas de agua, conviene renovar todo, y saldría más caro, además nunca hay estacionamientos, y ese es otro de los problemas”.
TESTIMONIOS
›› ‘Viene gentea conocer’
Desde hace 31 años, Catalina Macías instaló en la calle Díaz Mirón su local de comida, que tiene el nombre de ‘La rana encantada’.
Comenzó en un pequeño local de 2 por 4 metros, pero conforme pasó el tiempo logró ampliarse.
Catalina, quien comenzó su negocio con una sola empleada, ahora cuenta con 7 a su cargo, y asegura que se ha visto beneficiada por los eventos realizados en la Plaza Expiatorio, además de la remodelación de la calle Madero.
“La explanada y los eventos han ayudado aquí, también el Cervantino que viene gente a conocer, a probar”.
Su única queja es el aumento de la inseguridad en las calles aledañas.
“El vandalismo sí está más cruel de que ya no puedes así tan fácilmente andar a gusto en la calle, en ese aspecto ha cambiado mucho, tienes que cuidarte más”.
Uno de los pocos comercios localizados en la calle 5 de Febrero, es la veterinaria Sepúlveda, que desde 1980 ha estado establecida en esta calle.
Su dueño, Javier Carrillo, afirmó que el flujo de personas ha aumentado desde que la calle Madero fue remodelada.
›› Aumentala afluencia…y la inseguridad
Fue hace cuatro años cuando una amiga de la familia Escobedo Hernández les sugirió utilizar su casa para vender cena.
Sin embargo, uno de los integrantes de la familia decidió que el negocio que se abriría en su casa sería un bar.
Pero no era un bar cualquiera, pues lo que lo hace diferente es que el bar está escondido, y la calle no es muy comercial.
“Antes el único lugar (de entretenimiento) que estaba por la calle 5 de Febrero, fuera de la Zona Peatonal era la Décima Musa y el Meeps; de ahí fue el Kino Room, luego el Kingston y otros cafés”, explicó Josué Escobedo, hermano del iniciador del bar.
La ubicación de ‘Infamous Bar’, a la altura del templo Expiatorio, pero sobre la calle 5 de Febrero, les ha ayudado, pero también perjudicado.
“La remodelación de la Madero y Plaza (Expiatorio) ha ayudado a la afluencia de gente por el día, pero también ha empeorado la inseguridad; muchos negocios han abierto y cerrado por lo mismo; en la noche está súper oscuro”.
Por calles
Precio promedio de renta de locales por metro cuadrado, en 4 calles principales del Centro:
Madero $129
5 de Febrero $71
Pedro Moreno $69
Díaz Mirón $55