Estudiantes de la Facultad de Medicina de la Universidad de Guanajuato (UG) Campus León demandan una educación de calidad, pues sólo cuentan con seis profesores de tiempo completo y la población de nuevo ingreso se ha incrementado de 90 a 180 alumnos en los últimos años.
Además aseguran que cuenta con un sistema educativo obsoleto que data de 1974 y denunciaron que de ocupar siempre los dos primeros lugares en calidad educativa, han caído hasta un séptimo y octavo lugar a nivel nacional.
En conferencia de prensa, dirigentes del llamado Comité Universitario Representativo de Actualización, Renovación y Salud Educativa (CURARSE), expusieron que hay sobrepoblación estudiantil, falta de maestros y falta de infraestructura con salones viejos y obsoletos, así como falta de laboratorios y falta de material cadavérico en el anfiteatro, para realizar prácticas.
Señalaron que se corre el riesgo de perder la acreditación de licenciatura porque desde hace 12 años no han dado solución a las recomendaciones que realizaron los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior (CIEES).
Joselyn Rivera Vilchis dijo que aunque la Facultad de Medicina de León ya cuenta con nuevas aulas en el nuevo Campus de la Universidad de Guanajuato en León, sólo están los alumnos del primer semestre o lo que llaman fase uno.
“Ya no tenemos lugares en las nuevas instalaciones los que vamos a entrar a la fase dos; tenemos que recibir clases en salones obsoletos en las viejas instalaciones (a un lado del Hospital General Regional)”, señaló.
Destacaron que la población estudiantil de ingreso era de 90 alumnos y que en los últimos años se incrementó a 180.
“Se ha duplicado y el profesorado ha disminuido; además en cada salón reciben clases hasta 100 alumnos y las aulas están en malas condiciones”, aseveró.
Los estudiantes señalaron que en la plantilla de maestros hay 48 de tiempo completo (de 30 a 40 horas), pero que en realidad sólo son 16 los profesores “útiles” (que sí les dan clases); lo peor es que 10 de ellos ya presentaron su renuncia a los módulos a sus cargos, por lo que sólo quedan seis docentes.
“Tenemos 18 profesores jubilados en los últimos 18 meses, dos de tiempo completo, dos tiempos medios y seis templos parciales y a todo esto se le resta a la plantilla”, explicó María Álvarez Padilla.
Con lista en mano, los estudiantes manifestaron que cuentan con 90 profesores con tiempo “parcial” (de 2 a 17 horas), quienes incumplen sus horas; sólo son dos o tres horas por módulo que dura mes y medio.
“No cumplen sus horas. Poder cumplir sus horas es tenerlos aquí ocho horas al día”, aseguró.
Sin embargo, dijeron que cuentan con 108 profesores “invitados”, quienes no perciben un sueldo.
Ven sistemaobsoleto
Los alumnos del comité directivo de CURARSE denunciaron también que el sistema educativo de la Facultad de Medicina ya es obsoleto.
“Tiene un sistema modular, por áreas de la medicina. Por semestre se manejan dos o tres módulos, dependiendo de lo largo. Este sistema ya es obsoleto porque somos la única escuela de Medicina del País que cuenta con este sistema modular que data de 1974, en vez de ser por asignaturas”, señaló Joselyn Rivera Vilchis.
Añadió que esto los pone en serias desventajas con otras facultades del País e internacionalmente, y que la Facultad de Medicina de León se quedó estancada, en específico en la fase uno.
“Porque ni nos van a contar nuestro semestre en otro lado porque no hay sistema de asignatura, ni aquí porque se pierde un módulo y un semestre completo”.
Se añadió que el sistema educativo es arcaico porque las necesidades, tanto tecnológicas como pedagógicas, de las nuevas generaciones son distintas.
“No tenemos suficientes salones para albergar al doble de alumnos que ingresan y con los mismos recursos”, añadió Joselyn.
Temen perder acreditación…y plazas
Los estudiantes de la Facultad de Medicina del Campus León de la Universidad de Guanajuato (UG) señalaron que en cuanto al internado para los alumnos avanzados ninguno se queda sin plaza, pero que en los últimos años se les ha relegado y se les envía a hospitales con poco prestigio y que se privilegia a universidades privadas.
“Por ejemplo en 2012 salieron 88 nuevos médicos. Este año salieron 87 de la nueva generación y no se dio una sola plaza en el Hospital de Celaya”, dijo Alejandra Serratos López.
Añadió que cada año disminuye el número de plazas en hospitales donde tenían tradicionalmente más presencia.
Se mostraron preocupados porque la Facultad podría perder la acreditación ante instituciones como los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior (CIEES), por incumplir las recomendaciones que se han realizado desde el 2001.
Apuntaron que ya perdieron la acreditación durante cuatro años y los alumnos tuvieron que acudir con médicos amigos para poder cumplir los requisitos que se exigen en sus estudios.
Los dirigentes señalaron que enviaron un pliego petitorio al rector de la Universidad de Guanajuato, José Manuel Cabrera, pero que hasta el momento no les ha dado respuesta.
También lo desmintieron, pues declaró a los medios que la Facultad no estaba en riesgo de perder acreditación.