Se fue ya el primer año de la Administración y en el servicio de transporte ni siquiera los regidores tienen claro un proyecto para modernizarlo.
Hasta ahora el servicio de transporte público sigue funcionando de forma irregular, con 101 permisos vencidos, decenas de camiones cuyos dueños recibieron la concesión pero no tienen los documentos que lo acreditan. Al exterior en las calles sigue siendo el mismo el servicio, la modernización no ha llegado.
No existe un sistema de cobro automático, los choferes siguen dando un mal trato, conduciendo a toda velocidad y no reciben capacitación. Los accidentes siguen cobrando vidas y muchos lesionados.
AM entrevistó a 4 de los 5 regidores que integran la Comisión de Seguridad y Transporte, encargada de dirigir las mejoras en el servicio. Sólo uno de ellos es un usuario frecuente del servicio, el resto no lo usa.
Los regidores no conocen todos los nombres de las empresas que prestan el servicio, éstas son: Atucsa, Verdes de Guanajuato, Omnibus Urbanos y Suburbanos del Bajío, Saetas, Urpago, Evi, Supacel, Autobuses Tamayo, Autobuses San Miguel Octopan, STDA, Autobuses San Miguel Octopan, Autobuses Puerta de Oro del Bajío, Autodiamante, Urbanos y Suburbanos del Bajío.
Tampoco saben que de la Central de Autobuses sólo el Latino 1 llega hasta la zona más poblada, la norponiente.
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