La falta de agua provoca reacciones en el organismo humano, especialmente en el cerebro, donde puede llegar a producir un estallido de mal genio.
Una buena idea es promover salud y estilo de vida sano entre la población mexicana, básicos para el bienestar humano, campo en el cual Bonafont revela —con estudios científicos de por medio— que “la deshidratación puede causar mal humor”.
El hecho de que 83% del cerebro humano está compuesto de agua da cabida a sostener que la deshidratación puede tener un impacto en las funciones cognitivas en el estado de ánimo de una persona sana.
Varios estudios científicos, llevados a cabo en personas sanas, dejan ver efectos de la deshidratación en el estado de ánimo y la función cognitiva.
En las pruebas se observó que el estado de ánimo se vio significativamente afectado y existieron efectos importantes como la somnolencia, fatiga, niveles más bajos de energía y estado de alerta, así como el aumento de la confusión.
La autora de uno de estos estudios, Natalie Pross, y sus colaboradores, encontraron que las personas deshidratadas manifiestan incapacidad para lograr la calma y sentirse felices.
En cuanto a los parámetros fisiológicos, el color de la orina fue un marcador temprano de deshidratación y al mismo tiempo la textura de la saliva demostró un interesante marcador no invasivo de la falta de agua.
Los estudios fueron realizados en la Universidad de Connecticut bajo la dirección del doctor Armstrong, y tenían el objetivo de conocer los efectos específicos que causan la falta de agua, como que con sólo 1.5% de deshidratación se pueden afectar las funciones y rendimiento de una persona adulta sana.
“En Bonafont cumplimos con el compromiso de promover la importancia de una hidratación saludable, así como los beneficios a la salud que ésta conlleva, sin embargo como líderes de la categoría, decidimos trascender hacia el campo del estado de ánimo”, asegura la nutrióloga Gloria Cervantes, gerente de Nutrición de la firma.
“Consideramos que (la hidratación) es un aspecto muy importante relacionado con el bienestar de las personas, por lo que estamos comunicando a los consumidores la relación que existe entre la deshidratación y el mal humor”, agrega.
Una sonrisa y un trago de agua
Con el buen humor como punto de partida, la firma pone en escena una serie de caricaturas que intentan poner de manifiesto la necesidad de hidratarse en medio de las mil y una cosas que se viven a diario.
“Para comunicar esto a los consumidores, lanzamos una campaña de comunicación con un tono humorístico e inspirada en los efectos que puede tener la deshidratación en las situaciones cotidianas de nuestras consumidoras, llamada Deshidratadas anónimas”, comenta Aminta Ocampo, gerente de Relaciones Públicas de Bonafont.
De esta manera, opina, se puede tocar un tema científico con un lenguaje cotidiano, divertido, donde las consumidoras se identificarán con una situación en especial y se sentirán una más de las Deshidratadas anónimas.