El partido León-Santos congregó a la clase política y religiosa de la ciudad, que apoyaron a la Fiera desde palcos y plateas.
Uno de los palcos centrales fue ocupado por el Arzobispo Alfonso Cortés Contreras y el empresario Miguel Salim Alle, que se sentaron juntos.
En una jugada contra la portería del Santos, José Juan Vázquez venció al portero Oswaldo Sánchez y anotó un gol en el minuto 34, al tiempo que Salim que llevaba puesto un chaleco negro con el escudo del León y el Arzobispo con su atuendo de saco y camisa negros, se pararon de sus butacas y gritaron el gol.
A la izquierda del palco donde el Arzobispo y Salim disfrutaron el encuentro, el doctor José Ángel Córdoba Villalobos portaba su playera de la fiera que se alcanzaba a ver entre el saco cerrado que llevaba encima.
El doctor estaba en compañía de Jesús Martínez Patiño, presidente del Grupo Pachuca, y cada que tenían oportunidad, señalaron las jugadas y en algunas ocasiones se llevaron las manos a la cabeza.
En el recorrido a la izquierda por los palcos, Éctor Jaime Ramírez Barba, secretario de Gobierno, observó el partido desde plateas donde festejó los goles y en el minuto 42 se paró de un salto de su butaca cuando Carlos Peña marcó el segundo tanto.
Otro de los funcionarios que asistió al partido fue Carlos Zamarripa Aguirre, procurador de justicia del estado de Guanajuato, al que se le veía relajado recargado en su asiento de uno de los superpalcos con cristal, a donde algunas meseras en vestidos negros le llevaron a él y sus acompañantes bebidas y botana.
Junto al Procurador, René Urrutia de la Vega, subprocurador de la Región ‘D’, se tiró de los cabellos y jaló su barba en las jugadas a gol que ponía en riesgo la portería esmeralda y con un grito de euforia brincó de su asiento y alzó los brazos cuando Franco Arizala metió el tercero al minuto 70.
Entre la afición de los palcos, Arturo Elías Ayub, representante del Grupo Carso, permaneció sentado y sólo se paró a festejar los goles.
Por su parte, Francisco Javier Aguilera Candelas, director de Seguridad Pública Municipal, acudió al partido y al parecer trabajaba, pues estuvo en contacto con oficiales y se sentó en la zona de la puerta 10 junto con los aficionados del Santos.
Al cierre del partido, funcionarios y religiosos se sumaron a un murmullo de pesadumbre por el descuento de Javier Orozco.

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