Este 7 de diciembre, el Teatro del Bicentenario cumplirá su tercer año de vida, habiendo refrendado su posición no sólo como el escenario más avanzado en términos de equipamiento, sino también como el de oferta más esplendorosa a nivel estatal.
Alonso Escalante, director general del recinto, hace un balance del año que concluye y de lo que vendrá para el magno recinto ubicado en el Forum Cultural Guanajuato.
¿Cómo ha sido el tercer año de vida del Teatro del Bicentenario?
Lo compararía con el vuelo de un avión: estamos en el despegue, en ese impulso inicial con muchas cosas por consolidar, aunque ha sido un despegue muy dinámico.
Ha sido un año con una asepsia financiera que nos ha permitido ser más creativos, fortalecer las relaciones con instituciones nacionales e internacionales y tener una programación constante y de buena calidad.
¿Cuáles son los motivos de orgullo del Teatro en este año?
Tener tres óperas en un año es algo que nos enorgullece especialmente, porque además fueron muy exitosas y con un gran resultado y mérito artístico. Sin duda es uno de los factores que han logrado que el Teatro se posicione alto en el panorama cultural de nuestro País.
Con una de estas producciones se tiene una relación más estrecha con la Ópera de Bellas Artes, ¿no es así?
El propósito original era que Bellas Artes coprodujera “Rigoletto”, pero no se logró por cuestiones de tiempo; pero sí ha retomado la producción para su programa de Ópera en los Estados. Ya se ha presentado en Durango y Torreón y en 2014 se llevará a otros espacios, incluyendo el Palacio de Bellas Artes en noviembre. Es un logro importante y un motivo de alegría para quienes compartimos la vida de este teatro.
¿Qué hitos señalaría en la programación de 2013?
Destacaría la presencia equilibrada de artistas de México y el extranjero; el balance entre tradición e innovación y las pinceladas de originalidad que aportaron propuestas como la Compañía XY, el Ballet de Biarritz, la Orquesta Johann Strauss de Viena o más recientemente el pianista Mikhail Rudy.
Algunas personas se quejan de que el Teatro esté “desperdiciado” durante el Cervantino.
Creo que será algo que cambiará durante las próximas ediciones y ya hemos tenido pláticas con Jorge Volpi al respecto. El Teatro no ha tenido muchos eventos del Cervantino por dos razones: lo que nos ofrecía el Festival no se adecuaba a nuestra línea de programación o bien, era demasiado caro.
Para los espectáculos del FIC, el Teatro cubre honorarios de los artistas. Hubiera sido glorioso tener a la Sinfónica de Chicago, pero no disponíamos de los 5 millones de pesos necesarios.
¿Qué nos puede anticipar para la programación de 2014?
Queremos consolidar más una temporada operística. Es probable que tengamos tres producciones, pero de momento tenemos seguras “La Traviata” y “Tosca”. También trabajaremos más por atraer público a propuestas teatrales y más espectáculos para niños.
¿Qué le gustaría decirle al público para concluir?
Invitarlo a hacer suyo estos espacios, tanto el Teatro como el Forum. Seguiremos ofreciendo espectáculos de gran calidad a un precio por debajo del mercado, precisamente para incentivar a la gente que venga. Tenemos un tesoro donde se presentan actividades que vale la pena ver y que nos dejarán marcados para siempre.