Con sus productos, ellos están comunicando al mundo que el agave no sólo sirve para hacer tequila.
Desde hace cinco años, Nutriagaves de México elabora jarabe e inulina a partir de esta planta bajo las marcas Dulsweet y Olifructine, y exporta el 97% de su producción.
En México tiene contratos de proveeduría con las cadenas Soriana y Chedraui, y en tiendas especializadas en productos orgánicos o naturales.
Juan Carlos Garza, gerente de ventas, destacó que sus marcas han tenido gran aceptación en diversos países; de hecho, sólo les falta vender en África para tener presencia en todos los continentes.
“El 70% se va a Estados Unidos; el 20% a la Unión Europea, tenemos clientes en España, Holanda, Alemania, Dinamarca, Italia, entre otros, y el 7% a Asia y Oceanía”, dijo.
Al inicio, la empresa generaba 60 empleos y su producción mensual era de 100 toneladas; ahora, la fuerza laboral se duplicó y fabrican alrededor de 300 toneladas. A finales de este mes tendrán un nuevo equipo, con lo que incrementarán en 100 toneladas la capacidad instalada.
Uno de los problemas que han tenido que enfrentar es el desabasto de agave, originado por la baja del precio; además de las fluctuaciones en la paridad cambiaria del peso contra el dólar, en el caso de las exportaciones.
Para superar la crisis de los precios de la materia prima decidieron plantar 950 mil plantas de agave al año por su cuenta.
“Estamos sembrando en diferentes lugares, como Guanajuato. Se capacita a agricultores que deseen cultivar agave orgánico para asegurar el suministro en el futuro”, señaló Garza.
Explicó que para elaborar el jarabe y la inulina, primero se jima el agave, se tritura la piña para extraer el jugo en crudo y luego pasa por etapas de filtrado y desmineralizado para tener el jugo.
“Prácticamente podríamos decir que es inulina de agave líquida, es una fibra que se encuentra en la planta del agave”, explicó.
Si queremos inulina de agave pasa por un proceso de concentrado, posteriormente secado para tener el polvo que se comercializará. Si queremos jarabe de agave se pasa por un proceso en donde se libera la fructosa y luego se condensa”.
Ramón González Figueroa, director del Consejo Regulador del Tequila, indicó que a raíz de una sobreoferta de agave empresarios decidieron aprovecharlo para otros usos, como es la inulina y el jarabe.
Le sacan lo dulce al agave
Con sus productos, ellos están comunicando al mundo que el agave no sólo sirve para hacer tequila.