El próximo 28 de marzo se realizará el Baile del Cotillón en Hacienda del Refugio donde debutarán 60 jovencitas, motivo por el cual Alfonso Villaseñor Ruiz y su esposa Gloria Maisterrena de Villaseñor comparten la historia de esta tradición leonesa.
La práctica social de este baile llegó a la ciudad en el año de 1953 cuando Alfonso Villaseñor Söhle fue presidente del Club Rotario de León.
La idea original del baile fue traída por el Presidente Rotario y su esposa María del Carmen Ruiz Villaseñor de “La Lonja”, club privado ubicado en San Luis Potosí. Cuando ellos decidieron realizarlo en el Club Rotario de León empezaron solamente con hijos e hijas de los socios.
Las mujeres impulsoras del baile junto a la esposa del Presidente fueron Virgina Ulibarri de Torres y Lupita García de Maldonado. Esta última y su esposo Jesús Maldonado, dispusieron el patio de su casa ubicada en la calle 5 de Mayo en la Zona Centro, para los ensayos que fueron dirigidos por Reynaldo Cabrera, quien además tocaba el piano en el evento.
Posteriormente, a la organización del evento se sumaron Margarita Longoria de Llaguno, Leonor López de Garza y Josefina Gómez Guerra.
Al principio el baile estaba conformado por cuatro cuartetos, luego fueron 6 y 7.
En años más recientes, debido a la demanda de las quinceañeras que querían participar, esto ha desaparecido.
Debido al crecimiento de participantes, además del baile de primavera se realizaron cuatro Cotillones de otoño para darle cabida a todas las niñas pero no tuvo éxito ya que todas las señoritas deseaban participar en el de primavera.
“Todos los cambios son buenos… El concepto se volvió un poco más discoteca, aunque nunca ha dejado de ser lo elegante, lo fino, lo tradicional”, dijo Gloria Maisterrena.
“Esta es una herencia familiar que nos dejaron nuestros padres pidiendo que cuidáramos mucho el Cotillón y no lo dejáramos morir y pues de ahí que estemos prácticamente en todos los Cotillones mis hijos, mi esposa y yo al pendiente de todo esto, dándole para que el baile siga siendo un éxito y un atractivo para las quinceañeras de León”, compartió Alfonso Villaseñor.
“Le hemos puesto tantas ganas, tanto cariño tanto esfuerzo y lucha que yo creo que es una transformación porque es un abrirse a una convivencia social abierta a niñas de diferentes colegios, se ha visto tan bonito, tan sano y cuidadoso”, expresó Gloria Maisterrena.
Con el tiempo el Baile ha ido creciendo hasta convertirse en el fenómeno que es ahora dentro de la sociedad leonesa, apoyando y difundiendo su motivo principal que es recaudar fondos para ayudar a fundaciones, asociaciones, instituciones y programas que favorecen a sectores desprotegidos.

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