Autoridades del Parque Metropolitano desalojaron ayer un local de renta de bicicletas ubicado en la entrada principal del parque, bajo el argumento de que la concesión de los propietarios ya había vencido.
Después de las 10 de la mañana, unos treinta elementos de Seguridad y personal del parque, acompañados del director del parque, Daniel Olaf Gómez Muñoz, y la abogada Laura Valadez García, sacaron unas 450 bicicletas y refacciones y las subieron en camionetas para llevarlas a una bodega.
El pasado 18 de diciembre también trataron de desalojar el lugar, pero tuvieron que regresar las bicicletas debido a que no actuaron conforme a derecho.
Alista denuncia concesionario
El problema se suscitó porque acusan a los concesionarios de no estar al corriente con el pago de la renta, además de que su concesión expiró en 2011 y se niegan a pagar la luz.
Esto fue negado por parte de los trabajadores del local, quienes aseguraron que cada mes pagan la renta y son los directivos del parque los que se niegan a recibirlo. Por esa razón, decidieron depositar el dinero en el juzgado VII de partido, a fin de comprobar sus pagos.
“Pagamos 3 mil 900 pesos al mes, ellos quieren sacarnos y el año pasado querían que firmáramos un nuevo convenio donde nos cobrarían 7 mil pesos de renta, por lo que no quisimos firmar. La luz y el agua nunca nos la cobraban con el director anterior, desde que llegó este señor (Gómez Muñoz) nos empezaron a cobrar”, señaló Gonzalo Rivera Alonso, encargado del local denominado “My Bike”.
Agregó que Antonio Pérez Tobías, propietario del establecimiento, ya se encontraba en el Ministerio Público para levantar una denuncia en contra del director del Parque y tratar de recuperar las bicicletas.
Justifican desalojo
Daniel Olaf Gómez Muñoz, director del Parque Metropolitano, justificó el desalojo de un negocio de bicicletas dentro del parque.
Dijo que se trató de un proceso administrativo ordenado por el Consejo Directivo del Parque, luego de que los concesionarios se negaran a firmar un nuevo acuerdo.
“Lamentablemente desde el año 2011 no tienen contrato para estar aquí. El Consejo instruyó en su momento la realización de un nuevo contrato, del que no aceptaron los nuevos cobros, entonces procedimos a retirarlos”.
Explicó que los nuevos cobros se debían a que estaban ubicados en la puerta principal y a que el consumo de la energía eléctrica corría a cargo del parque.
“Les pedíamos alrededor de 5 mil pesos mensuales, yo no veo una situación de abuso, creo que era una tarifa justa”.