En muletas, caminó de su oficina al salón de sesiones el coordinador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el Senado, Miguel Barbosa, a reintegrarse a los trabajos del pleno, luego de una enfermedad que en noviembre lo tuvo en peligro de morir, y en la que perdió un pie.
Los senadores Emilio Gamboa, del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Ernesto Cordero, de Acción Nacional (PAN), acompañaron a Barbosa de su oficina al salón de sesiones y pasaron por el patio del hemiciclo, donde sonriente saludó a periodistas.
Entró al salón de sesiones, a ocupar su escaño que tiene junto el sillón de la vice coordinadora de su grupo, Dolores Padierna, y los legisladores lo recibieron de pie con un largo aplauso.
El presidente de la mesa directiva, Raúl Cervantes (PRI) abrió el periodo de sesiones y enseguida dio la bienvenida a Barbosa, quien pidió la palabra y de pie desde su escaño agradeció el cariño y la solidaridad que ha recibido de sus compañeros, por la enfermedad que sufrió por descuidarse y que lo tuvo al borde de la muerte, dijo.
Dolores Padierna, segunda al mando en la bancada del PRD, agradeció las expresiones de apoyo a su coordinador. “Nos haces muchísima falta”, dijo a Barbosa. Regresas rodeado de nuestro cariño y apoyo incondicional.
El perredista Barbosa expresó su solidaridad a senadoras que han padecido enfermedades o que están en tratamiento médico, como son Maki Ortiz, Martha Elena García.
Con expresiones emotivas, Barbosa respondió a las afirmaciones de sus compañeros de Legislatura y concluyó: “No sé si es un término político, pero los quiero mucho”.

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