Los niños han dejado de ser niños en Siria. Se han convertido en escudos humanos, traficantes, combatientes; moneda de cambio, víctimas de torturas, violaciones o detenciones sumarias.
El primer informe íntegro del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, sobre violaciones contra menores perpetradas en casi tres años de guerra en Siria, es un detallado listado de atrocidades “cometidas por todos los bandos”.
Al menos 10 mil menores han muerto hasta noviembre de 2013, muchos de ellos víctimas de bombardeos o ataques “indiscriminados y desproporcionados”.
Otros tres millones de niños viven desplazados dentro del país sin acceso a educación o sanidad y casi un millón se refugia en países vecinos donde su suerte no es mucho mejor.
La peor crisis de refugiados desde Ruanda, según ha apuntado la ONU, ha colapsado países limítrofes como Turquía, Jordania o Líbano, donde, según el documento publicado esta semana, se han dado casos de reclutamiento o intento de reclutamiento de niños.
Emplean a niños sirios como escudo humano
Los niños han dejado de ser niños en Siria.