En el partido entre León y Pumas, correspondiente a la Fecha 6 del Clausura 2014, no hubo racismo, a pesar de las protestas de la directiva leonesa.
La Comisión Disciplinaria determinó que no hay pruebas suficientes para decir que seguidores felinos realizaron manifestaciones racistas en contra de los colombianos Eisner Loboa y Franco Arizala en las tribunas el Estadio Nou Camp.
“Esta Comisión determina como insuficientes dichas pruebas, basadas en el hecho de que se perciben algunos sonidos provenientes de la tribuna, pero en ningún momento hay una identificación plena del aficionado o aficionados que las realizaron”, avisó la Disciplinaria por medio de comunicado.
El presidente de Grupo Pachuca, Jesús Martínez Patiño, se quejó por las acciones de los fanáticos universitarios.
Debido a eso, la FMF pidió pruebas para tomar una decisión, las cuales desestimó.