Dice una frase “Padre no es el que engendra sino el que cría”.
Este pensamiento se llega a comprobar con los señores Céline Lucienne Andrée Marie Caréto y José Cipriano García Ramírez.
Felices de educar, orientar, dar amor, pero sobretodo llenarla de una vida dichosa, los señores García Caréto, tomaron la decisión de adoptar a Myriam Guadalupe Janine.
Luego de cumplir con los requisitos de adopción, llegó el momento esperado para los señores García Caréto, al tener entre sus vidas a Myriam, menor que les robó el corazón.
Ya como integrante de la familia García Caréto, Myriam acudió en compañía de sus padres a la parroquia de Santa Margarita, recinto elegido para recibir el sacramento del bautismo.
En esta importante celebración, Myriam contó con la presencia de Carmen Flores García y Tomas Alfaro Montelongo, padrinos comprometidos con la educación espiritual de su ahijada.
Al recibir el agua bautismal que la convirtió en nueva integrante de la iglesia católica, la menor agradeció a Dios por las bendiciones derramadas sobre su vida.
Por su parte, papás y padrinos elevaron una oración en señal de gratitud por darles la oportunidad de convertirse en esos maestros, amigos y padres que guiarán a Myriam por el camino recto de la vida.
Para celebrar el ingreso a la gray católica, los señores García Caréto disfrutaron de una íntima reunión en el restaurante Rincón Gaucho.
Por siempre Céline Lucienne y José Cipriano serán esos padres que darán raíces a Myriam, pero sobretodo alas para volar y así descubrir el bello mundo que la rodea.

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