Ucrania acusó a Rusia de efectuar una “invasión y ocupación militar” luego de decir que fuerzas armadas rusas tomaron posiciones alrededor de una base de la guardia costera y en dos aeropuertos de la estratégica península de Crimea, reportó el Ministerio del Interior de Ucrania.
Moscú se mantuvo en silencio sobre las acusaciones, mientras el gobierno ucraniano pidió la intervención del Consejo General de la ONU para evitar que empeore el conflicto.
Cualquier incursión militar rusa en Crimea elevaría drásticamente los riesgos en el conflicto de Ucrania, un país que vio huir a su presidente pro-ruso luego de meses de manifestaciones.
El viernes, el fugitivo presidente ucraniano Viktor Yanukovich reapareció en Rusia, en su primera presentación pública desde que huyó de Ucrania días atrás. Prometió luchar por el futuro de su país, pero dijo que no pedirá ayuda militar.
En Kiev, el parlamento adoptó una resolución donde pide a Rusia que detenga sus acciones contra la soberanía e integridad territorial y pidió la intervención del Consejo General de la ONU.
El nuevo ministro del Interior de Ucrania, Arsen Avakov, escribió en un mensaje en Facebook que el aeropuerto internacional de Belbek, en Sebastopol, fue bloqueado por militares rusos. “Sólo puedo describir esto como una invasión y una ocupación militar”, agregó.
En el aeropuerto de Simferópol, un fotógrafo de The Associated Press observó que militares armados con fusiles de asalto patrullaban el lugar el viernes por la mañana.
Estos efectivos vestían uniformes sin insignia. La mayoría fue renuente a conversar con la prensa. Uno de esos militares, quien se identificó solo como Vladimir, dijo que eran parte de una “unidad de autodefensa” que garantizaría que ningún “fascista” llegue desde Kiev ni de ninguna otra parte.
No se reportaron incidentes de violencia en el aeropuerto civil de Simferópol, capital de Crimea, ni en la terminal aérea militar en Sebastopol, en un puerto sobre el Mar Negro. En Simferópol, un hombre que habló por las fuerzas militares que patrullan el aeropuerto los describió como milicianos crimeos.
El Servicio de Guardias Fronterizos de Ucrania informó que unos 30 soldados de la Flota de Rusia en el Mar Negro estaban posicionados fuera de la base costera ucraniana en el área de Sebastopol. Agregó que los militares dijeron estar ahí para evitar que cualquier arma en la base sea tomada por extremistas.
El Ministerio de Exteriores de Rusia se negó a hacer declaraciones sobre el particular mientras que un portavoz del Ministerio de Defensa no estuvo disponible para dar información.
Al mismo tiempo, se dio a conocer que la fiscalía general ucraniana se está preparando para buscar la extradición del presidente Yanukovych por sospecha de asesinato masivo en los violentos enfrentamientos de la semana pasada en Ucrania entre manifestantes y policías, donde fallecieron al menos 80 personas.
Yanukovych huyó hace una semana de la capital, Kiev, después de que manifestantes opositores al gobierno tomaran el control de la capital y el parlamento. Antes de este viernes, fue visto por última vez el sábado dando un mensaje televisivo donde aseveró que sigue siendo el presidente ucraniano y que no reconocerá a ningún nuevo gobierno.
El parlamento de Ucrania eligió el jueves a un nuevo gobierno encabezado por un tecnócrata pro-occidental que de inmediato se comprometió a impedir la escisión nacional.
Moscú ha enviado señales confusas sobre la situación en Ucrania aunque se comprometió a respetar la integridad territorial de este país.
El presidente ruso Vladimir Putin acaricia desde hace mucho tiempo el sueño de acercar aún más a la órbita de Moscú a Ucrania, un país de 46 millones de habitantes y considerado cuna de la civilización rusa.
La población de Ucrania tiene lealtades divididas entre Rusia y occidente.
Crimea, tomada por las fuerzas rusas en el siglo XVIII, fue alguna vez la joya de la corona, primero del imperio ruso y luego del gobierno soviético. Moscú ha prometido defender a los ucranianos de esta península (que son pro-rusos), donde también está su principal base naval. Ucrania y occidente por su parte han pedido a Rusia que se mantenga alejada.