La autoridad migratoria de Estados Unidos trata a los niños migrantes como adultos en miniatura y los priva de un abogado que garantice la protección de sus derechos, indica un informe.
El estudio, denominado “Un viaje lleno de peligros: niños migrantes navegando el sistema de inmigración de Estados Unidos”, advierte que en 2013 un total de 24 mil 668 menores fueron puestos a disposición de autoridades migratorias en la Unión Americana.
La mayoría de esos niños y adolescentes provenían de México y Centro América, indica el análisis elaborado por el Centro de Estudios de Género y Refugio y Niños en Necesidad de Defensa.
Además, la cifra se incrementó casi al doble con respecto a 2012, cuando se registraron 13 mil 625 menores.
El reporte señala que los niños dejan sus países de origen por varias razones, entre ellas, para escapar de persecución, abandono, explotación o violencia; o para reunificarse con sus familiares.
Además, los traficantes de personas suelen victimizarlos y trasladarlos a Estados Unidos contra su voluntad.
Aunado a esos abusos, indica el reporte, los niños migrantes no acompañados en Estados Unidos se enfrentan a un procedimiento complejo, la mayoría de ellos sin acceso a un abogado, lo que merma sus posibilidades de obtener una resolución positiva de sus casos.
“Al final, los niños enfrentan el retorno a sus países sin que haya habido consideración de si el retorno sería contrario a sus mejores intereses”, establece el análisis.

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