Trolebús de la cultura

La iniciativa que busca reactivar 10 trolebuses con proyectos artísticos ha tenido sus tropezones.
Tras su lanzamiento el 15 de enero, la convocatoria ha sido bajada en dos ocasiones de la página web de la Delegación Cuauhtémoc, cuya Dirección de Cultura, con Gerardo Zapata a la cabeza, impulsa el renacimiento de esos espacios.
“Los de informática han tenido problemas técnicos. No hay mano negra”, aclaró Jorge Buenfil, subdirector de Fomento y Promoción Cultural de la delegación.
La convocatoria originalmente cerraba el 15 de febrero, pero Zapata decidió ampliarla hasta el 1 de marzo.
El Gobierno de Japón donó a la Cuauhtémoc, según Buenfil, cuatro trolebuses en agosto de 2002 y ocho trolebuses en julio de 2005. Hoy dos están dados de baja debido a su severo deterioro.
Algunos se quedaron en manos de distintas áreas de la delegación y a otros se les dio un fin artístico.
Marco Vieyra, por ejemplo, comenzó a operar el trolebús ubicado en Sonora y el Parque México con el apoyo inicial del FONCA a partir de 2008, donde presentó más de 50 obras teatrales dirigidas por personalidades como Richard Viqueira, Alicia Sánchez y Juliana Faesler.
La Otra Nave, como nombró Vieyra al espacio, también albergó música y artes plásticas y, con una inversión de 80 mil pesos, el teatrero adaptó la parte superior del trolebús como centro de lectura. A los tres años dejó de contar con el presupuesto del FONCA y empezó a cobrar un donativo voluntario de 150 pesos para poder pagarle a las compañías que se presentaban.
Zapata se opone tajantemente a que los proyectos artísticos, que deberán ser elegidos por el Comité de Cultura en la sesión del 16 de abril, tengan un costo para el público. Las bases de la convocatoria, sin embargo, omiten esta precisión.
“Tengo entendido que no se puede cobrar y eso es muy bizarro. Deberían ajustarse más a la realidad para que la gente pueda vivir de su trabajo. En el Foro Shakespeare manejamos acceso libre con cooperación voluntaria para hacer consciente a la gente de que los artistas somos seres humanos que comemos y necesitamos vestido. No se trata de que nos dejen una pastilla de menta o un centavo chino”, expresó Bruno Bichir.
El actor, quien participa en la convocatoria, dijo que en caso de quedar seleccionado intentará atraer a patrocinadores para que paguen la producción y la nómina de la obra teatral Un día loco, de Maruxa Vilalta, que cuenta precisamente las andanzas de una mujer en trolebús.
A oídos de Zapata, quien estrenó la Dirección de Cultura el 16 de octubre de 2012, llegaron las quejas de los vecinos de que el trolebús del Parque México se utilizaba como cafetería y operaba a altas horas de la noche.
Lo cierto, dijo Vieyra, es que en los estrenos de las obras a menudo se ofrecían canapés y vino como cortesía a los invitados y que únicamente en su cuarto aniversario organizó una gran fiesta con todo DJ.
Zapata se percató de que un convenio verbal entre un funcionario de la Cuauhtémoc y Vieyra respaldaba La otra nave, por eso quiso “poner en orden a los trolebuses”.
Los representantes de los proyectos artísticos elegidos firmarán un convenio con la Dirección General Jurídica y de Gobierno de la delegación a más tardar en mayo.
“Cada propuesta seleccionada se presentará en el trolebús que le sea asignado por un periodo de tres meses”, se indica en las bases de la convocatoria. Lo cierto es que, con base en los resultados, el convenio se podrá renovar.
Hasta el cierre de edición únicamente se habían presentado 10 proyectos artísticos, incluido el de Eloy Hernández, quien estaba a cargo del trolebús Doble vida, localizado cerca del Parque España, gracias a un acuerdo con la Dirección Territorial Roma-Condesa de la delegación.
“Mi intención es realizar el Segundo Festival de Teatro en Espacios No Convencionales teniendo como país invitado a Chile y como estado invitado a Tlaxcala, del 16 al 31 de mayo. Quiero darle continuidad a un proyecto que ha sido exitoso: el año pasado llegamos a mil 400 espectadores”, expresó Hernández.
Para el teatrero, hay posturas contradictorias respecto a los trolebuses al interior de la Delegación Cuauhtémoc, pues José Luis Domínguez Rodríguez, asesor del jefe delegacional, al final de un acto público le expresó su malestar por la iniciativa de Zapata.
“Me dijo que la convocatoria era un error y que se iba a encargar de corregirlo. Al día siguiente habían bajado la convocatoria de la página web. Además, remolcaron el trolebús del Parque España el sábado 8 de febrero sin avisar a la Dirección de Cultura”, aseguró Hernández, quien le da su voto de confianza a Zapata, pero sigue esperando que el delegado lo atienda.
Como parte del remozamiento de plazas públicas, los trolebuses antes situados en la Plaza Luis Cabrera y el Parque España se reubicarán. Cinco se localizarán en el Parque La Pera de Tlatelolco; la Plaza Los Ángeles, de la colonia Tepito-Guerrero; el Mercado Paulino Navarro; en Rosas Moreno y Sullivan y en el Deportivo Cuauhtémoc. Falta definir a dónde irán los dos restantes.
“No están en la basura, se están resguardando para rehabilitarlos y se reintegrarán con los proyectos ganadores donde no estorben u opaquen una plaza”, concluyó Zapata.