La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aseguró de manera precautoria un ejemplar de guacamaya roja ala verde (Ara chloroptera), que pretendían trasladar vía aérea de Mérida a la Ciudad de México, y que carecía de la documentación que acreditara legalmente su procedencia. 
Como resultado de las labores de coordinación entre las autoridades del Aeropuerto Internacional de Mérida y la Profepa, inspectores federales detectaron la posesión del ave y encontraron que los datos no coincidían con el sitio de partida, además de que no existía información referente a su aprovechamiento. 
Se prosiguió al levantamiento de la respectiva acta de inspección, asegurando el ejemplar y trasladándolo a la Unidad de Fomento a la Conservación y Aprovechamiento Sustentable de la Vida Silvestre (UMA) “Parque Zoológico El Centenario”, para su resguardo y protección. 
Con base en la Ley General de Vida Silvestre, es motivo de infracción poseer ejemplares de vida silvestre fuera de su hábitat natural sin contar con los medios para demostrar su legal procedencia o con las disposiciones para su manejo establecidas por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), lo que acredita una multa de 50 a 50 mil veces el salario mínimo vigente. 
La misma delegación de Profepa advirtió que el adquirir ejemplares de vida silvestre sin la documentación que acredite que provienen de aprovechamientos sustentables autorizados o que fueron legalmente importados, contribuye al tráfico ilegal de vida silvestre y a la consecuente afectación al ecosistema, y a la degradación de la biodiversidad y de los servicios ambientales que los recursos naturales representan. 
Señaló que continuará la vigilancia para evitar el tráfico ilegal de estas aves y de cualquier otro tipo de especie protegida por la ley. 

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