Vivir el Rally Guanajuato México es tener una máscara de tierra en la cara. Eso es nada comparado con la adrenalina que se desborda en todo el lugar.
Juan Ortega llegó al tramo de El Chocolate desde el jueves, 24 horas antes del primer tramo de ayer. Acampó y aseguró que nada es tan intenso como saber que un auto pasará a más de 120 kilómetros por hora.
“Así se vive el Rally”, platicó el padre de familia quien tiene 11 años asistiendo al Rally. Estuvo en el ‘charco’, que se ubica dentro del tramo El Chocolate.
La carrera inició a las 9 y otras 60 personas asistieron. Todas buscaron un resguardo a las inclemencias del sol matutino que pegó duro de inmediato. La mayoría se sentó en el enterregado y usó gorros para cubrirse.
En el transcurso del día, no hay comunicación alguna con el mundo exterior.
Eso significa estar “perdidos” en la nada en un tramo de 44 kilómetros de longitud entre cerros boscosos, al lado de un riachuelo, ahí lo único que se puede hacer por más de una hora es ver autos por menos de 10 segundos destrozando el suelo y revolucionando motores. El sonido dejaba sordo por unos segundos.
“Papá, mejor cárgame; yo tomo la foto”, dijo un pequeño de cinco años que no podía ver por el terregal que se levantó al aire. El niño en ningún momento dejó de ver la pista y buscar más autos con la mirada.
Hubo quien no se elevaron con la adrenalina, usaron la opción fácil y se ‘conectaron’ con alcohol, “Pásame otra cheve”, se escuchaba en el lugar.
“Ya ni me acuerdo cuántas llevo, ahorita ya ando bien, nos “armamos” con todo lo que hubiera en la casa y nos venimos de contrabando”, dijo Ricardo Juárez, le dijo a su familia que iría a una entrevista de trabajo.
Antes de que terminara la carrera, la gente había logrado conectar en ambiente, todos echaban carrilla y bailaban con la música que salia de las bocinas de un auto.
La “botana” de todos fue Daniel Ulices Gonzales, quien al pasar de una lado a otro del charco por el que cruzaban los autos, se cayó a la vista de todos. Se puso rojo y salió corriendo a su casa de campaña.
La carrera terminó, muchos tal vez ni sabían el nombre de los pilotos o su nacionalidad, ellos sólo quería ser parte del evento, el cual levantó más que polvo… levantó emoción y buena vibra.
EN NÚMEROS
El chocolate
2 pasadas por El Chocolate hicieron los pilotos del WRC.
44Kilómetros mide el tramo El Chocolate, uno de los más largos del Rally México.