Un juez sentenció a más de tres décadas de prisión a los dos hombres que asesinaron al guardia de seguridad de la Universidad Iberoamericana la noche del 11 de septiembre de 2011.
Juan Enrique Ruiz Agripino y José Carlos Pérez Romero fueron sentenciados por homicidio doloso y robo calificado.
Esa noche con armas de fuego irrumpieron en la caseta de vigilancia de la universidad donde se encontraba Juan José Rocha Vargas, de 43 años, quien fue asesinado.
A otro guardia lo maniataron para entrar al área donde se encontraba el cajero automático de Santander, lo sacaron de la pared y con él escaparon en una camioneta de la misma institución, según informó entonces el subprocurador de Justicia Manuel Ángel Hernández Hernández.
A las 4 de la madrugada el compañero de la víctima que estaba atado, consiguió soltarse y llamó a Emergencias.
Cuando acudió a la caseta de vigilancia encontró a Juan José sin vida.
Poco después del robo las autoridades señalaron que los asesinos se llevaron 413 mil 770 pesos y una camioneta pick up Nissan perteneciente a la universidad.
Días después fueron detenidos los hoy sentenciados y cuatro personas más que estaban implicadas en otros 14 delitos cometidos en esta entidad.
Luego de las investigaciones se aclaró el homicidio y se dio a conocer que los involucrados en la muerte de Rocha Vargas fueron Juan Enrique y José Carlos.
Así mismo se informó que también habían participado en el atraco cometido en la empresa con razón social Distribuidora de Gas LP S.A. de C.V. de donde robaron 50 mil pesos.
Ayer el titular del Juzgado Séptimo Penal dictó sentencia condenatoria a ambos implicados.
A Juan Enrique Ruiz se le impuso una condena de 37 años y siete meses de prisión, mientras que su cómplice Juan Carlos fue condenado a pasar 33 años y cuatro meses en la cárcel.
El juez además les impuso a cada uno una multa de 331 mil 128 pesos por la reparación de daños y tres mil 837 por gastos funerarios.
Sentencian a más de 30 años de cárcel a asesinos de guardia de la Ibero
Hace dos años y medio lo mataron para robar un cajero automático que contenía 413 mil pesos, fueron sentenciados a pasar más de 30 años en prisión.