Familiares, compañeros y autoridades municipales despidieron ayer a Alejandro Miranda Ortiz, el policía muerto la madrugada del domingo en Las Hilamas.
A la 11 de la mañana, el Gobierno municipal recibió en Cepol poniente a alrededor de 70 familiares y amigos del ex policía.
Al evento asistieron la Alcaldesa Bárbara Botello, el Secretario del Ayuntamiento, Martín Ortiz; el secretario de Seguridad Pública, Francisco Javier Salazar Soni y el director de la Policía, Francisco Javier Aguilera Candelas.
Destacó en el homenaje la ausencia de los integrantes del Ayuntamiento: solamente asistió, y con retraso, la regidora Beatriz Manrique Guevara.
Durante el homenaje, el secretario de Seguridad destacó la labor del Alejandro Miranda Ortiz en la corporación y se unió a la pena que padece su familia.
Por su parte, la alcaldesa Bárbara Botello señaló que era un día triste para la ciudad.
“Hoy es un día muy doloroso para el municipio de León, esta es una mañana de tristeza pues hemos perdido a uno de nuestros elementos de la Policía Municipal. Nos reunimos con profundo pesar para evocar la memoria de Alejandro Miranda Ortiz”.
Luego de pedir un minuto de aplausos para el oficial asesinado, Botello Santibáñez, visiblemente conmovida, expresó su apoyo a los familiares.
Posteriormente, hizo un llamado a los policías para seguir el ejemplo de Miranda Ortiz.
“A todos los policías presentes les pido que sigan trabajando con convicción, con valentía y con honor, como lo hizo su compañero Miranda Ortiz”.
Finalmente, se comprometió con los familiares para hacer justicia por la muerte del policía.
Apoyan a la familia
Los servicios fúnebres y dos seguros por 750 mil pesos son el apoyo que hasta el momento brindará la Administración Municipal a la familia del policía Miranda Ortiz.
Tanto el secretario de Seguridad Pública, Francisco Javier Salazar Soni, como la presidenta municipal Bárbara Botello Santibáñez, coincidieron en que buscarán una oportunidad de empleo para la viuda del elemento, Sandra Michel de Miranda.
“Es lamentable lo que hoy sucedió, estamos de luto, lamentamos mucho lo que está pasando la familia, no vamos a bajar la guardia, seguiremos trabajando”, dijo la Presidenta.
Ante las exigencias de justicia y al preguntarle a la Presidenta que sucederá con los implicados en el asesinato, aseguró que se dará castigo al responsable.
“No queremos que haya impunidad, apoyaremos con todos los elementos para que se esclarezca, para que se finque una responsabilidad, para que quien cometió este delito sea castigado, creo que eso es lo que la familia quiere también. Buscaremos la forma también de apoyarla, yo le comentaba a la señora de buscarle trabajo para que lleve otro ingreso a su economía”.
En la despedida de su compañero, Botello pidió a los policías:
“Sigan trabajando con convicción, con valentía y honor, como lo hizo su compañero. Su fallecimiento nos indigna y nos ofende pero fortalece el compromiso del Gobierno de redoblar esfuerzos para construir un León seguro y de justicia”.
Exigen cumplir a las autoridades
“¡Pero ahora sí cumple, Bárbara!”
La exigencia de los familiares del policía asesinado Alejandro Miranda Ortiz frente a las autoridades municipales fue justicia, luego de que la alcaldesa Bárbara Botello se comprometió a buscarla.
Las autoridades citaron a las 11 al homenaje póstumo al elemento asesinado, pero desde minutos antes, algunos familiares ya habían llegado.
Fue en la Cepol Poniente, dónde a la hora acordada el estacionamiento ya estaba repleto de patrullas. Algunas de ellas con sus torretas prendidas.
Minutos después, a lo lejos se escuchaban sirenas encendidas: eran las motopatrullas de Tránsito, que custodiaban la carroza que trasladaba el cuerpo de Miranda Ortiz a Cepol.
Atrás venían también patrullas de la Policía Municipal. La viuda, Sandra Michel, venía en la número 802 junto con sus hijos, y fueron recibidos por el director de la corporación, Francisco Javier Aguilera Candelas.
A la 11:10 la alcaldesa hizo su arribo para ofrecer una promesa a la familia: hacer justicia por la muerte del policía.
El secretario de Seguridad Pública, Francisco Javier Salazar Soni, también lamentó la pérdida irreparable: “que Dios nos dé fuerza para seguir”, resumió.
Botello Santibáñez pidió que le acercaran a Edson, de 10 años, el mayor hijo de Miranda Ortiz, y lo abrazó.
Luego de pedir un minuto de aplausos para el policía, la alcaldesa dijo que éste es un ejemplo de que en León se combate a la delincuencia con valor.
“Ratifico mi compromiso con su memoria, con su familia y con su ciudad. No descansaremos hasta que se haga justicia por este doloroso crimen. Su fallecimiento nos indigna y nos ofende, pero también fortalece más que nunca el compromiso del gobierno por redoblar esfuerzos para construir un León más seguro, un León de justicia. No vamos a bajar la guarda”.
El protocolo terminó tras el mensaje, pero no el dolor ni las exigencias de los familiares: “¡justicia!, ¡justicia!”, “¡pero ahora sí cumple, Bárbara!”, se escuchó en el lugar.
“Siempre salió adelante trabajando y dio la vida. Ningún elemento puede caer así. ¡Ya basta, ya basta!, más castigo, más fuertes castigos”, gritó Valentín Miranda Ortiz, hermano del policía, mientras sostenía su foto.
Una caravana salió al panteón municipal. A las 12:30 la carroza hizo su arribo al lugar, donde se realizó una misa ante alrededor de 700 personas entre familiares amigos y compañeros de trabajo de Miranda Ortiz.
Cerca de las 2:30 de la tarde, entre aplausos y porras, despidieron al oficial que murió en cumplimiento de su deber.
La música de mariachi y, posteriormente, de banda, opacaban el llanto de los familiares.
Poco a poco, la gente salió del lugar. Sus rostros mostraban incredulidad más que resignación. El dolor permanece.
“Él está bien, y nosotros estamos felices. Vámonos”, dijo una mujer que consolaba a otra mientras lloraba.
‘Era un padre muy entregado’
Sandra Michel Mena Martínez, esposa de Alejandro Miranda Ortiz, policía municipal caído en cumplimiento del deber, lo recordó como un marido y padre cariñoso y al pendiente de su familia.
Así lo expresó luego de asistir al homenaje de cuerpo presente que ayer le rindió a Alejandro la corporación de Seguridad Pública de León en las instalaciones de la Central de Policía poniente.
“Era muy entregado a su familia, muy cariñoso con sus hijos, nos llevaba a pasear, iba por ellos a la escuela, jugaba con ellos, y a mí me apoyaba en todo, hasta en quehaceres del hogar me ayudaba”, dijo la joven viuda, a la que ayer las autoridades se comprometieron a respaldar en su desgracia.
Alejandro deja una familia de tres pequeños de 10, 9 y 3 años de edad.
El elemento tenía 32 años de edad e ingreso a la corporación en el 2007, luego de tener complicaciones para sacar a su familia adelante como pespuntador en el sector del calzado y en el área de la serigrafía.
“Por la escasez de trabajo se tuvo que salir, era pespuntador, serigrafista, y por un trabajo, un salario más seguro, decidió entrar a la corporación de Policía”, recordó la señora Sandra.
Aunque, comentó también, antes ya había trabajado como guardia de Seguridad en la Feria Estatal de León y le gustaba ese trabajo.
“Aunque yo siempre estuve en desacuerdo pero lo tuve que apoyar”, recordó la señora, con su dolor a cuestas.
Alejandro y su familia viven en Paseos del Molino y las necesidades persisten, agregó Sandra Michel.
“Sí había carencia porque es mucho el trabajo que ellos tienen, riesgo, peligro, ya lo vieron ahora con mi esposo, y se me hace muy poco el salario para arriesgar la vida, y para sustentar a tres hijos”, dijo.
Al Gobierno le pidió que haga su trabajo, “que limpien la basura que hay mucha en León”.
Y para su esposo tuvo más palabras: “Lo quiero mucho, gracias por todo, siempre lo voy a recordar”.