La Secretaría de Seguridad Pública ya prepara otra célula de la Policía para atacar a las pandillas que continúan en guerra constante, pero aún no está listo.
Mientras tanto el número de muertes de jóvenes pandilleros aumenta debido a las riñas.
El grupo antipandillas será preparado física, táctica y mentalmente en las instalaciones de la Academia Metropolitana de la Policía Municipal.
Aún no se informa el número de elementos que tendrá este grupo, pero se aseguró que serán al menos 50 los policías que entren a las zonas de pelea de las pandillas en las colonias más conflictivas de la ciudad.
“Estamos conformando con gente nueva recién salida, de tres meses de antigüedad, el grupo antipandilleril; tentativamente serán 50 debidamente equipados; tenemos a una fuerza importante que va a actuar”, adelantó hace unos días Francisco Salazar Soni, secretario de Seguridad municipal.
Añadió que estos policías superarán al número de pandilleros que comúnmente se agreden durante una riña campal.
Durante la pasada administración, el grupo “Pantera” estaba dedicado a combatir el pandillerismo en León.
Era una célula de la Policía Municipal especializada para controlar las riñas entre pandillas.
Cuando Ricardo Sheffield Padilla estaba al mando de la Presidencia Municipal, la Policía combatía a bandas de jóvenes que derramaban sangre en sus peleas casi diarias, principalmente en calles de las colonias Las Arboledas, León I y Chapalita.
El grupo se disolvió y los agentes regresaron a las calles para tratar todo tipo de delitos dejando a la deriva el creciente problema, el cual cada día cobra más muertes.
Fallan programas
Aunque existen programas impulsados por la Alcaldía para la prevención y rehabilitación de jóvenes que son parte de pandillas, no se ha logrado evitar que sigan las muertes por la lucha de poder y territorio en las calles de León.
Durante la anterior administración la Presidencia Municipal tenía un programa para la prevención y rescate de personas, principalmente jóvenes, que son vulnerables a las adicciones y participaban en pandillas.
Se trató del programa “Lobo” del Instituto Municipal de la Juventud que inició en la ciudad en 1997.
En León hay más de 450 mil jóvenes y se calcula que existe un número aproximado de mil bandas que se integran principalmente por varones de hasta tres generaciones.
El programa “Lobo” impulsó el deporte mediante la realización de torneos entre pandillas para enseñar a los integrantes de las bandas a socializar pacificamente con otras y evitar la violencia.
Principalmente era en partidos de futbol donde se enfrentaban las bandas de varias colonias; además se realizaban conciertos.
También se ofrecían tratamientos de tipo psicológico y psiquiátrico, así como pláticas personalizadas, grupales y familiares; entre las más importantes estaban la orientación para dejar adicciones y la prevención en contra de las drogas y vandalismo.
Pero el “Lobo” se fue con el pasado alcalde, pero en esta administración se continuó con programas en León Joven.
En la presente administración existe “Fénix”, uno de los programas de “chavos banda” que trabaja con pandilleros, pero también ayuda en la prevención para que no eviten er parte de estos grupos.
También atienden a jóvenes que no estudian y no tienen empleo, además de que apoyan psicológica y económicamente a embarazadas.
Tiene las mismas metas y atenciones que “Lobo”, pero no ha surtido efecto.
Una de las principales actividades de “Fénix” es la limpieza de la ciudad para que los jóvenes valoren el medio ambiente.
Este programa busca promover el cambio de la imagen que se tiene de las y los chavos banda ante la sociedad, incluyéndolos en actividades de mejora en favor de su propia comunidad, como rehabilitación de espacios públicos, limpieza de lotes baldíos, reforestación y pinta artística de bardas, entre otras.
Azotan bandas la León I
León I está dentro de la lista de las 15 colonias consideradas como las más conflictivas del municipio y sus habitantes saben bien que hay zonas y horarios a los que es mejor “sacarles la vuelta”.
“Los Cheetos”, “Los Aztecas”, “Los Snoopys” y “Los Mini Snoopys” son los dueños de la colonia y cada fin de semana marcan su territorio con intensas riñas campales.
De toda la colonia León I la calle Ángel Vázquez Negrete es la más conflictiva, pues es allí donde las pandillas se reúnen desde las cinco de la tarde; pero la “zona roja” o el sitio oficial de las campales es el bulevar Enrique Aranda Guedea.
En las riñas las piedras ya resultan insuficientes; los vecinos comentan que los pandilleros incluso llegan a portar machetes, cuchillos, bates de beisbol y hasta pistolas.
Los viernes por la noche es cuando comienzan las peleas y los más afectados son las propiedades.
Vidrios estrellados, carros abollados, ventanas rotas y paredes grafiteadas son parte del recuento de los daños que hacen cada fin de semana los vecinos afectados.