París es considerada la cuna de la moda, pero para Jean Paul Gaultier los parisinos no disfrutan de ella verdaderamente; sólo la ven como un medio para llamar la atención.
El afamado diseñador francés dice que son los latinoamericanos quienes tienen una verdadera apreciación de la moda, capaz de quitarle el carácter siniestro.
“La moda es una cosa muy agradable, no es siniestra. Estoy seguro que los mexicanos que tratan la muerte con alegría no tendrán problema en tratar la moda con alegría”, dijo Gaultier en español el viernes en una rueda de prensa en la capital mexicana. “Los franceses en realidad no apreciamos mucho la moda. Somos latinos, pero no al punto de ustedes (los latinoamericanos) que están para gustarse, llevar la ropa, los trajes, les gusta ser guapos”, agregó.
Gaultier se encontraba en la Ciudad de México para promover el concurso y programa de televisión “Elle México Diseña”, en el que será juez y ayudará a elegir a un mexicano que podría convertirse en la nueva estrella de la moda.
La emisión se estrena el 30 de abril en toda Latinoamérica.
A pesar de tener una vida entera dedicada los diseños, Gaultier confesó que su papel de juez le infunde algo de temor debido a su formación autodidacta.
Pero señaló que tenía la clave que lo ha guiado a lo largo de casi cuatro décadas en la industria: el instinto.
“Es muy intimidante. Como no me formé en escuelas de moda, me he hecho al instinto. Pero he estado de jurado y es muy difícil”, apuntó nuevamente en español, con un acento más parecido al italiano.
“Es muy interesante porque cuando un joven tiene pasión se ve y se da en la cosa final. Cuando uno pone pasión hace maravillas. No debes pensar demasiado, no debes intelectualizar, debes sentir la pasión en todo. El amor es lo importante”, refirió sobre la clave que lo ha llevado a ser uno de los consentidos de la moda.
Reconocido por su mezcla de lo excéntrico y lo clásico, Gaultier comenzó carrera en la moda de la mano del mítico Pierre Cardin. A los 22 años debutó con una colección homónima, que rápidamente lo posicionó como “el niño terrible de la moda”.
El creativo superó las pasarelas cuando en 1990 diseñó algunas piezas para la gira “Blond Ambition” de Madonna, entre ellas el emblemático corsé puntiagudo que la cantante lució y que a su vez catapultó a Gaultier a la fama internacional.
A sus 61 años, Gaultier se mostró incrédulo ante su permanencia.
“No sé cómo he hecho esto. Tengo la fortuna de ejercer la profesión que de chico quería hacer como un juego y continúo jugando. ¡Imagínate que a los 61 años pueda seguir jugando! Soy afortunado”, expresó.
Te trata de su primera visita a México en 30 años, y aunque ha incorporado diversos elementos de la cultura del país en su trabajo, se inspira particularmente en sus mujeres.
“He hecho una colección completa de Frida Kahlo, he hecho cosas inspiradas en los aztecas y voy a hacer otras, porque los días que he estado en México me da inspiración total”, afirmó.
Incluso contempla hacer del país su nueva residencia.
“Es un shock total. Estoy enamorado”, expresó. “Ustedes tienen todo: el pasado y el futuro. Si me voy a ver todas las cosas que hay en México debo vivir aquí. Es una cosa en proyecto”.
Otro de sus planes es traer a México la exhibición retrospectiva itinerante “From the Sidewalk to the Catwalk”, que ya ha visitado Canadá, Nueva York y próximamente llegará a París y Australia.
“Ser apreciado por gente que viene de una cultura de tanto porte sería muy importante para mí”, dijo Gaultier.

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