Fue presidente deportivo del Guadalajara de 2009 a 2010 y director deportivo en el Atlas entre 2010 y 2011. Es por eso que Rafael Lebrija conoce perfectamente lo que representa el clásico tapatío… Y las consecuencias que puede tener si no hay la suficiente vigilancia en las gradas.
El también ex presidente del Toluca lamenta lo sucedido el sábado en el estadio Jalisco. Asegura que la responsabilidad es compartida entre el ayuntamiento de Guadalajara y la directiva de los Rojinegros, aunque recuerda que es obligación de las autoridades desplegar un importante número de efectivos cuando se trata de un partido de alto riesgo, etiqueta colocada al choque entre Zorros y Chivas.
“(La seguridad) es cuestión de cada club, porque el municipio y las autoridades estatales son las que manejan eso”, aclara Lebrija, entrevistado vía telefónica. “El club solicita, ante la autoridad, que tenga el número de policías suficientes para poder evitar cualquier acontecimiento, como el que sucedió en el estadio Jalisco”.
“Es muy importante que haya coordinación y, si es necesario erogar una cantidad mayor, que se haga, pero hay que evitar a toda costa, sobre todo en un partido de tanta trascendencia, como era el clásico de Jalisco. Esos partidos son de mucho riesgo y, precisamente, lo que hay que hacer es mejorar el número de elementos de seguridad con los que se cuenta en el estadio”.
Lo que no sucedió. Los policías que intentaron controlar a los seguidores del Rebaño Sagrado no eran más de 50, abismal diferencia numérica con relación a la turba que enfrentaron.
“Sabiendo que es de alto riesgo, porque es como un partido América-Guadalajara, tiene que haber mayor seguridad, por lo que significa ese juego”, insiste. “Es muy importante que se mejore la seguridad y, si es necesario, contratar a más elementos, aunque la erogación le corresponda al club…”.
Gasto que las instituciones suelen negarse a realizar, sin importar el riesgo que conlleve el encuentro de dos aficiones antagonistas.
Lebrija no quita responsabilidad a los clubes, aunque reitera que el sentido común debe aparecer en las autoridades.
“Es de ambas partes, pero el municipio debe estar consciente de que va a ser un partido de alto riesgo”, reitera. “En este caso, fue la propia porra del Guadalajara, pero lo que se tiene que medir es el partido, porque va a ser complicado, tanto en la cancha como fuera y hay que tratar de evitar cualquier confrontación”.
“No nos hemos lamentado por alguna muerte… Ojalá nunca lo hagamos, pero —como van las cosas— hay que prever, no lamentar”. Requisito indispensable que, desde su perspectiva, faltó en el Jalisco.
Los Rojinegros aceptan castigo
Heriberto Ramón Morales, director deportivo del Atlas, informó que asumirán el castigo sin apelarlo. El saldo fue de 51 heridos. “Esto no debe ocurrir en ningún estadio… Cooperaremos para que estos hechos no queden impunes”.

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