A un día del Viernes Santo, los organizadores del  Viacrucis viviente del templo de la Divina Providencia, trabajan en los últimos detalles para la representación número 171 de la vida de Cristo.
El responsable de la representación desde hace 4 años es Ulises Núñez Jasso, quien dio a conocer que los ensayos iniciaron desde febrero.
“Los escenarios los empezamos a montar desde el Domingo de Ramos, ahorita ya está un escenario, nos faltan montar otros dos para las representaciones”, indicó.
El grupo denominado Hermandad de Nuestro Padre Nazareno del Templo de la Divina Providencia este año realizarán lo que será la 60 edición del Viacrucis.
Participaran alrededor de 100 personas en su mayoría jóvenes, que representan los personajes de Cristo, María, las Samaritanas, sacerdotes, los apóstoles, angelitos, mujeres piadosas y hasta los cargadores.
Se espera la llegada de cientos de ciudadanos que participarán como espectadores y recorrerán las calles para recordar el misterio de la entrega de Jesucristo.
Las actividades comenzarán desde hoy Jueves Santo a las 7 de la noche con la misa correspondiente al Lavatorio de Pies, etapa que significa la Última Cena de Jesús con sus apóstoles.
En el caso del Viacrucis del Viernes Santo, comenzará a las 8 de la mañana en el atrio del templo de la Divina Providencia, luego saldrá el recorrido sobre el bulevar Díaz Ordaz, Torres Landa, Guerrero, Revolución, hasta llegar al templo del Hospitalito y Obregón hasta terminar de nuevo en el templo.
En cada estapa se va representando cada una de las 14 estaciones en las que se conmemora la Pasión y Muerte de nuestro Señor Jesucristo, señaló Núñez Jasso.
Posteriormente a las tres de la tarde en la explanada de la Plaza del Comercio, se realiza la crucifixión viviente y ahí terminamos con la acción litúrgica de la muerte del señor en el templo, dijo.
A las 6 de la tarde la Hermandad participa en la procesión del silencio, donde acuden otros grupos de otras iglesias.
Semana Mayor
La Semana Santa o Semana Mayor, es una conmemoración católica que recuerda la muerte y resurrección de Jesús.
A lo largo de los años, los fieles católicos han difundido ideas al respecto dónde se señala que deben ser días de guardar.
Si bien hay días de guardar como el Viernes Santo, cuando se recuerda la Pasión de Cristo, en realidad hay más que celebrar, pues al final, con la resurrección, la esperanza de una vida mejor después de la muerte terrenal queda de manifiesto.
El padre Juan Manuel García Castillo, dijo que son días de mucha alegría, pero no es una algarabía ni alegría estrepitosa ni mucho menos, es alegría porque contemplamos el  misterio de salvación”.
El padre destacó que son días donde tenemos que hacer un espacio de recogimiento, crear un ambiente de tranquilidad para contemplar el misterio.
“Se le debe dar ese sentido de respeto, de mucho orden interior y sobre todo mucha paz interior”, aseguró.

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