La prohibición de desperdiciar agua el Sábado de Gloria y la veda que existe en Celaya, trajo como consecuencia que hayan disminuido algunas tradiciones como mojarse y la quema de los Judas.
En los barrios y colonias populares no se notó como años atrás los ‘manguerazos’ y ‘cubetadas’ de agua para abrir la Gloria y tampoco se registró la quema de Judas.
El titular de Protección Civil, Irám Álvarez de la Rosa, informó que no se tiene permitida la quema de “Judas”, debido a la veda que prohíbe la quema de juguetería pirotécnica.
Tampoco se observó el desperdicio del agua, debido a que desde días atrás la Comisión Nacional del Agua (Conagua) difundió una campaña que exhortaba a que este “Sábado de Gloria” no se malgastara el agua.
La dependencia enfatizó que ante la escases de agua que existe durante esta temporada y específicamente sobre el periodo de estiaje, no puede estar siendo desperdiciada a grandes magnitudes.
En el caso del desperdicio de agua, las multas van desde los 200 hasta los 500 pesos.
Tirar agua en la vía pública o molestar a personas es una falta administrativa que está establecida en el Bando de Policía y Buen Gobierno.
Se aplica en los casos en que se moleste a terceros y haya reportes, es entonces que la Policía Municipal puede intervenir.
Por otro lado, la quema de cohetes también está prohibida por condiciones de seguridad, después de las explosiones del Domingo Negro de 1999.
“Ya no existen las tradiciones de antes, ya la gente no abre la gloria ni los judas, ahora prefieren irse al antro, a tomar, a divertirse a la alberca. Cuando era niña salíamos a los arroyos, y hoy pues no hay dónde. Ya no existen esas tradiciones y es muy lamentable”, mencionó Marcela Medina.
Guadalupe Hernández es artesana de muñecos de cartón desde hace 25 años, ella manifestó que la quema de Judas acabó con la veda de 1999, pues a raíz de ésta, el Municipio prohibió la quema de pirotecnia, y trajo como consecuencia que la gente ya no compra los `Judas’, ni siquiera para tenerlos de adorno o como recuerdo.
La “Quema de Judas”, se realizaba todos los Sábados de Gloria y representa a los herejes; su quema ha adquirido diversos significados: la limpieza que se obtiene mediante el fuego, terminar con las “malas vibras”, o “desquitarse” de algún político.
La señora Guadalupe platicó que desafortunadamente la tradición murió, pero con ello también la costumbre de comprar muñecos de cartón.

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