En casa de García Márquez aún no vuelve la calma

A la calle Fuego aún no vuelve la calma.
Patrullas siguen resguardando los accesos de la vía, en Jardines del Pedregal, mientras los lectores de Gabriel García Márquez continúan con su peregrinaje hacia su casa, acompañados de ramos de flores amarillas.
Son testigos decenas de periodistas nacionales y extranjeros que continúan en las puertas del domicilio del escritor, en espera de que la familia dé noticias sobre el destino que tendrán las cenizas de su patriarca, fallecido el jueves a los 87 años, así como detalles de un libro que dejó sin publicar y que podría titularse En agosto nos vemos, o Nos vemos en agosto.
Rodrigo García Barcha, el hijo mayor, se presentó en el lugar hacia las 12:00 horas, aunque no dio declaraciones.
Entre los lectores que han acudido al domicilio estaba una colombiana radicada en el DF, Genis Sánchez, de 30 años, quien junto con su novio mexicano, Javier Vázquez, timbró para que le fuera recibido un ramo de flores y una carta donde le expresaba a la viuda su admiración por el autor de Cien años de soledad.
“Es un acontecimiento muy triste para todos los colombianos y latinoamericanos, pero es también un acontecimiento que nos recuerda lo grande que fue García Márquez y lo importante que fue para nuestra literatura y nuestra cultura”, expresó Genis, aprovechando la ocasión para agradecer a México el acogimiento que le dio a Gabo.
Gabo le llamaba medio mundo a García Márquez.
“El pasado jueves, Gabo, uno de los mayores genios literarios del siglo 20, se adelantó…”, decía a la cámara un periodista colombiano que grababa en el lugar.
Un cuarto de hora después, la familia -Mercedes Barcha incluida, hijos y nietos- abandonó la casa en tres autos, posiblemente aprovechando el domingo para ir a comer.