General Electric hizo una oferta para comprar la división energética de Alstom por 17.000 millones de dólares y la compañía de ingeniería francesa anunció que a fines de mayo decidirá si acepta la propuesta.
El gobierno de Francia, que regularmente interviene en la decisiones corporativas de las empresas, había objetado la venta de Alstom a GE, la compañía con sede en Connecticut, porque a su juicio amenaza empleos y la autonomía energética del país. Las autoridades presionaron para que se diera más tiempo a Siemens, competencia con sede en Alemania, para hacer una oferta.
Alstom describió el miércoles la propuesta de fusión con GE como “prácticamente perfecta” y señaló que si decide aceptar la oferta de Siemens tendría que pagar a la empresa estadounidense el 1,5% del precio de venta.
Alstom, pionera en la fabricación de trenes de alta velocidad, informó que se enfocará en sus operaciones de transporte tras la venta de su división de energéticos.