Niños “olvidan” celebrarse

Por falta de dinero algunos niños de León no pudieron festejar su día, pues tuvieron que salir a buscar el sustento para sus familias.
Tal es el caso de Alejandro, menor de nueve años, que salió desde las ocho de la mañana de su casa ubicada en la colonia Los Pinos para pedir dinero en las calles. En su camino pasó por el mercado Aldama, donde una mujer le dio su primer y único regalo: un oso de peluche.
Cerca de las 10 de la mañana llegó al cruce de Adolfo López Mateos y Aquiles Serdán, donde comenzó a pedir dinero a los automovilistas. Según platicó, su papá no tiene trabajo y lo que gana su mamá no alcanza para él y sus cinco hermanos.
“Al rato voy a festejar con mis hermanos, pero primero tengo que llevar algo de dinero para comer, sí sé que hoy es Día del Niño pero me vine a pedir algo de dinero”, comentó.
Al mediodía apenas desayunó, un señor al que le pidió dinero le regaló un plato con tacos al vapor. El menor agregó que diario sale a distintas partes de la ciudad a pedir, por lo que sólo va una o dos veces por semana a la escuela.
“Me voy a quedar aquí hasta las nueve de la noche, mi mamá no sabe dónde estoy y al rato tomo el camión para irme a ver qué alcanzo del Día del Niño”, indicó.
A unas cuadras sobre el mismo bulevar, Angélica de 11 años esperaba el rojo del semáforo para caminar entre los carros pidiendo una moneda a los automovilistas.
Según dijo, prefiere salir a pedir dinero que ir a la escuela, pues la situación económica de su familia no es la mejor.
“Al rato van a hacer una fiesta en la colonia por el Día del Niño, nada más voy a pedir algo de dinero y me voy”, mencionó la niña, al tiempo que omitió el nombre de la colonia donde vive.
Poco después de las 12 del mediodía aún no desayunaba, sólo tenía un puño de paletas que un automovilista le obsequió.