Los grandes patrimonios mexicanos han multiplicado sus inversiones en España en los últimos años. La larga crisis que sufre Europa, mucho más severa en los países de la periferia, ha puesto a tiro de estas chequeras un amplio abanico de activos. Compran a buen precio y además logran diversificar sus carteras. Para muchas de estas fortunas supone también el regreso a la tierra de sus antepasados. El aterrizaje la semana pasada de dos empresarios mexicanos en Liberbank -Ernesto Tinajero y Gustavo Tomé tendrán el 9% de las acciones- es la inversión más reciente protagonizada por el capital del País, aunque, como aseguran los expertos, no será la última.
“Hay una combinación de varios factores para explicar la tendencia”, dijo el consejero delegado de un banco privado español que viaja cada tres meses a Latinoamérica para asesorar a sus clientes. “La riqueza de los altos patrimonios mexicanos ha aumentado en los últimos años y tienen la necesidad de buscar alternativas porque su País no deja de ser una economía emergente sujeta a vaivenes. Además, ven en España una buena oportunidad no sólo por los precios, sino porque para ellos supone la puerta de entrada a futuros negocios en Europa. Mientras que para los ricos brasileños el trampolín europeo es Portugal, España lo es en el caso de los mexicanos. También cuenta el efecto ‘llamada’. El dinero llama al dinero, este colectivo de millonarios es muy reducido y se conocen todos”, añade.
Un sector que ha concentrado un buen número de operaciones es el financiero. Los bancos españoles han recibido como agua de mayo las inyecciones de capital de inversionistas mexicanos que han suscrito cuantiosas ampliaciones de capital. Además de la inyección de efectivo en Liberbank, está la compra del 5% del capital del Banco Sabadell por parte de David Martínez, un importante inversionista mexicano afincado de EU, o el acuerdo entre el Banco Popular y un grupo de inversionistas mexicanos liderados por la familia Del Valle, que tienen el 6% de los títulos.
“Algunas inversiones se han hecho a muy buenos precios, y otras a unos múltiplos más elevados. Hay que tener en cuenta que estos inversionistas tienen un concepto del binomio rentabilidad-riesgo más agresivo que los grandes patrimonios españoles”, comenta el delegado consejero desde un banco de inversión que ha protagonizado alguna de estas operaciones.
Aparte del sector financiero, los inversionistas mexicanos han realizado movimientos de calado en compañías españolas de corte más industrial, bien cotizadas, familiares o en manos del capital de riesgo. Esta semana, por ejemplo, el Grupo Sigma, junto con su socio chino Shuanghui, recibió el visto bueno de la CNMV para lanzar una oferta sobre la totalidad de Campofrío. Además, el pasado Verano el grupo ADO adquirió la compañía de autobuses Avanza por cerca de 800 millones de euros. Algo más lejana en el tiempo (2011), aunque también realizada en plena crisis, fue la compra por parte de Bimbo México de la marca Bimbo en España a Sara Lee por algo más de 100 millones de euros.
Los activos inmobiliarios españoles han despertado el apetito de los grandes inversionistas internacionales y algunas de las transacciones han sido protagonizadas por capital mexicano. Destaca la reciente compra de la sede de IBM en Madrid por los antiguos propietarios del grupo cervecero Modelo por más de 100 millones.
México es un País con desequilibrios en el reparto de la riqueza -encabeza con Chile la lista de desigualdad de países de la OCDE- y las fortunas locales se han visto beneficiadas por el crecimiento económico, con altibajos pero mayor al europeo, por la recuperación del vecino del norte, por la subida del precio de las materias primas y por la llegada de capital extranjero atraído por unos costes laborales que se han igualado en muchos sectores a los de China.
El resultado de la combinación de todos estos factores se puede observar en el último Informe de Riqueza Mundial de Credit Suisse. Los expertos del banco suizo cifran en 186 mil el número de millonarios mexicanos en 2013 y calculan que este privilegiado club aumentará un 47% en 2018 hasta alcanzar los 273 mil integrantes. Este aumento de la riqueza en el País también se observa en la última edición del ranking que elabora la revista Forbes con las personas más ricas del mundo. Hay 12 mexicanos entre las mil primeras fortunas del planeta. Carlos Slim, con una fortuna estimada en cerca de 50 mil millones de euros es el segundo hombre más rico del mundo. Slim entró en el capital de PRISA, grupo editor del diario El País, en 2011 a través de su inmobiliaria Carso y tiene el 1.98% del capital.
El interés del dinero mexicano por los activos españoles también se ha vivido en la Bolsa Mexicana de Valores. OHL y Banco Santander han captado importantes sumas de dinero gracias a la venta parcial de sus filiales en el País. OHL logró 400 millones con la colocación de su negocio de concesiones en México en junio de 2013, mientras un año antes el Santander recaudó más de 2 mil 700 millones con la venta del 25% de su filial.
“Conquista” México a España
Las grandes fortunas del País compran activos españoles y buscan multiplicar inversiones mediante su diversificación.